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DOGMA: IDEALISMO. En filosofía, Idealismo designa las teorías que —en oposición al Materialismo— sostienen que la realidad extramental no es cognoscible tal como es en sí misma, y que el objeto del conocimiento está preformado o construido por la actividad cognoscitiva.

Idealismo

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En filosofía, Idealismo designa las teorías que —en oposición al Materialismo— sostienen que la realidad extramental no es cognoscible tal como es en sí misma, y que el objeto del conocimiento está preformado o construido por la actividad cognoscitiva.

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Principios y variantes [editar]

Las distintas variantes de idealismo postulan distintos principios que modelan y conforman nuestra imagen del mundo de una manera determinada:

  1. la entidad en sí de lo real permanece en principio incognoscible, aunque la reflexión permita aproximarse asintóticamente a un conocimiento más refinado, en las teorías del idealismo subjetivo o trascendental.
  2. En el caso de las teorías del idealismo objetivo, esta doctrina epistemológica se complementa con la teoría metafísica de que el objeto conocido no tiene más realidad que su ser pensado por el sujeto; mediante la autoconciencia de éste, la verdadera esencia del objeto se devela como la actividad subjetiva de pensamiento como algo real y no abstracto.

La definición que antecede corresponde, dentro de las escuelas filosóficas, al idealismo alemán y en concreto a Kant. No obstante Kant es al mismo tiempo materialista, pues contempla la existencia del mundo exterior, independientemente del hombre, cognoscible para éste, aunque no en su totalidad; la cosa en sí es para Kant un residuo del idealismo. El objeto del conocimiento es, y es una perogrullada, conocer, y ello no es una actividad exclusiva del hombre. Esta oposición formal o académica, que de suyo se comprende, oculta sin embargo la esencia de la filosofía, es decir, la relación entre el ser y el pensar; dualismo entre ambos o identidad. ¿Es el mundo "real" como lo muestran nuestros sentidos? o ¿es parte sí, parte no? ¿Puede el hombre conocer la cosa en sí de Kant; la esencia de la materia?

El idealismo distingue, por lo tanto, entre

  1. el fenómeno (del griego φαινομαι, fainomai, "mostrarse" o "aparecer"), que es el objeto en tanto que es conocido (como "aparece" frente a los sentidos y la inteligencia),
  2. y el noúmeno (del griego νοεω, noeo, "comprender" o "inteligir"), que es el objeto tal como sería en sí mismo.

La realidad para el idealismo no consistirá en aquello que está frente al sujeto como algo dado que existe por si mismo, sino en aquello que está en el sujeto como "un contenido de su conciencia"

Características [editar]

Las características principales de este movimiento, resumiendo, son:

  1. No conocemos las cosas tal y como son en sí (noúmeno), sino lo que aparece (percibimos) aquí y ahora (fenómeno).
  2. El sujeto construye, al menos en parte, el objeto: para Kant el sujeto es activo en el sentido de que influye en lo conocido a partir de sus estructuras aprióricas y de los procesos que en ellas descansan.
  3. El conocimiento es independiente de la experiencia, porque los objetos del conocimiento son los juicios a priori.
  4. Pero al conocimiento sólo se puede llegar a través de la experiencia porque el objeto del conocimiento son los juicios sintéticos.

Representantes e influencia posterior [editar]

  • Filósofos idealistas fueron:
  1. Immanuel Kant, desarrollador del idealismo alemán;
  2. los neokantianos;
  3. y los precursores de tres variantes del idealismo:
    1. idealismo subjetivo de Johann Gottlieb Fichte,
    2. idealismo objetivo de Friedrich Wilhelm Schelling
    3. idealismo absoluto de Georg Wilhelm Friedrich Hegel, así como las distintas escuelas hegelianas.

 

  • En un sentido radicalmente distinto, se denomina a veces idealismo a la teoría platónica de que las Ideas (la forma inteligible de las cosas, comparable a la esencia en el sentido aristotélico del término) existen separadamente de los objetos en un mundo inteligible.

Conclusión [editar]

En la historia del transcurso del pensamiento filosófico el idealismo es una variante fundamental de esa historia. Es la actitud del filósofo que no se conforma con lo que en apariencia, "hay". Postula mejor una realidad superior inextricablemente ligada a la estructura intrínseca de la conciencia humana.

No es en modo alguno la actitud espontánea de la existencia individual. Es una actitud a la que trabajosamente se ha llegado en la historia, y a la que no muchos hombres pueden acceder, chocando con la dificultad de encontrar en la conciencia, un mediador, entre objeto y sujeto.

Véase también [editar]

DOGMA: MATERIALISMO. La lucha entre materialismo e idealismo constituye el contenido del proceso histórico filosófico. En el siglo XVII el término «materialismo» se solía usar principalmente en el sentido de representaciones físicas acerca de la materia, y desde comienzos del siglo XIX se usa en el sentido filosófico para oponer el materialismo al idealismo.

Materialismo

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Contexto [editar]

La lucha entre materialismo e idealismo constituye el contenido del proceso histórico filosófico.

En el siglo XVII el término «materialismo» se solía usar principalmente en el sentido de representaciones físicas acerca de la materia, y desde comienzos del siglo XIX se usa en el sentido filosófico para oponer el materialismo al idealismo.

Historia [editar]

Doctrinas materialistas del Antiguo Oriente [editar]

Los primeros vestigios que se tienen de la doctrina materialista se remontan a fines del tercer y principios del segundo milenio a. de n. e. en las culturas egipcia y babilónica, donde se formaron las primeras concepciones materialistas espontáneas. También y un poco más tarde pero con mayor integridad se la encuentra en la filosofía de la India y China Antigua.

En monumentos de la cultura egipcia antigua se menciona por ejemplo «el agua fría creadora de todos los seres y de la que proceden todas las cosas, así como el aire que llena el espacio y se halla en todas partes», lo cual muestra que ya en ese entonces se planteaba en forma embrionaria la cuestión del origen material de los fenómenos naturales. O puede que hayan interpretado estos elementos desde un punto de vista netamente simbólico.

En la cultura babilónica, por ejemplo, nos encontramos con el astrónomo Seleuco (siglo II a. de n. e.) quien ya en ese entonces formuló conjeturas acerca de la estructura heliocéntrica del mundo.

En la India Antigua aparece a mediados del primer milenio a. C. en la doctrina lokaiata (o escuela de los chárvakas) que sostenían que el mundo era material, compuesto de cuatro elementos primigenios: la tierra, el agua, el fuego y el aire. De estos elementos se formaban también los seres vivos, incluido el hombre, los cuales luego de morir se descomponían nuevamente en estos elementos. Los chārvākas además, sometieron a crítica las doctrinas religiosas imperantes en esa época sobre la existencia de Dios, el alma y el mundo del más allá, demostrando que al morir el cuerpo, desaparecía la conciencia, por lo que consideraban absurda la doctrina de la transmigración de las almas.

El materialismo de los chárvakas se hallaba íntimamente relacionado con su ateísmo. Posteriormente en la corriente sankhya (cerca del año 600 a. C.) se sostenía que el carácter material del mundo se desarrollaba a partir de una substancia primigenia (prakriti); pero el logro más importante de esta corriente fue el postulado de que el movimiento, el espacio y el tiempo son propiedades inseparables de la materia.

Al comienzo de nuestra era esta corriente filosófica no resistió la lucha contra el idealismo y terminó por admitir la existencia de las almas aparte e independientemente de la materia.

A medida que se desarrollaba la filosofía hindú antigua, la concepción de la materia compuesta por los cuatro elementos (fuego, aire, agua y tierra) fue sustituida por representaciones más desarrolladas basadas en la estructura atomista del mundo. En las escuelas filosóficas niaia y vaisesika surgen las ideas de que el mundo se compone de pequeñas partículas de diversa cualidad que se hallan en el éter, en el espacio y en el tiempo. Estas partículas serían eternas, increables e indestructibles, al tiempo que los objetos compuestos de ellas serían mutables, inestables y transitorios. Estas ideas materialistas ejercieron un fuerte influjo sobre escuelas y doctrinas religiosas de la época, como por ejemplo en la escuela religiosa mimansa, la cual reconocía la realidad del mundo, cuyo ser no depende de ningún creador, existe eternamente y se compone de partículas regidas por la ley autónoma del karma.

En la China Antigua encontramos la doctrina materialista en la teoría del conocimiento de Mo-tse (479 - 381 a. C.) en oposición a Confucio. Aportes importantes también las dio el taoísmo, cuyo creador Lao-tse (siglos VI a V a. C.) sostenía que el mundo, que es eterno, se halla en movimiento y mutación continuos.

El movimiento, según los taoístas, es regido por el tao (ley natural). Las ideas materialistas ingenuas cobraron sucesivo desarrollo en la doctrina de Xunzi (313 - 238 a. C.) una de las relevantes figuras del confucionismo, quien a diferencia de otros confucianos consideraba que el cielo no posee conciencia y es parte de la naturaleza, en la que incluía asimismo el Sol, la Luna, los astros, las estaciones del año, la luz y las tinieblas, el viento y la lluvia, y que la sucesión de fenómenos celestes discurre según determinadas leyes naturales, de modo que el destino de los hombres no puede ser regido por una inexistente «voluntad del cielo».

Xunzi afirmaba que el hombre, contrariamente a los animales, sabe mancomunar sus esfuerzos y organizar su vida pública, que puede conocer el mundo circundante y aprovechar los conocimientos adquiridos en su bien; además de que el conocimiento empieza por la percepción, pero es gobernado por el pensamiento que cumple leyes naturales.

Por último ya en las inmediaciones de nuestra era la encontramos en Wang Chung (27 - 97 a. C.) quien sostenía que el mundo se compone de la substancia qi, la cual se mueve en la eternidad, mientras que el tao es la ley de la propia realidad. Por la acción recíproca de dos qi —los enrarecidos que se hallan en el espacio celeste y los condensados que se hallan en la tierra constituyendo los diversos cuerpos— son engendradas todas las cosas. Sostenía que el hombre es un ser natural compuesto de substancia material en el que se ha instalado una energía vital, un principio espiritual elaborado por la circulación de la sangre, la cual desaparece al morir el hombre. Este materialismo era ingenuo y metafisico.

Materialismo de la Grecia Antigua [editar]

Desde el siglo VI a. C. la filosofía se desarrolla con mayor ímpetu en la Grecia Antigua. Allí la corriente materialista surge en controversia con la religión principalmente en los filósofos representantes de la llamada escuela de Mileto; Tales de Mileto (ca. 624 - 547 a. C.), Anaximandro (ca. 610 - 546 a. C.) y Anaxímenes (ca. 585 - 525 a. C.).

Según la doctrina de Tales, el agua es el principio de todas las cosas; todo procede del agua y todo se convierte en agua.

Anaximandro tomó como sustancia primaria de todo lo existente el apeiron, principio indeterminado que engendra las cosas y los fenómenos mediante el movimiento y la segregación de contrarios tales como «lo húmedo y lo seco», «lo frío y lo cálido». Según esta doctrina todo se encuentra en constante rotación, una cosa surge del apeiron y otra desaparece y se decompone transformándose en apeiron, lo cual siguiendo un curso materialista hace uno de los primeros intentos de representar el mundo dialécticamente, en movimiento.

Anaxímenes tomó como sustancia primordial el aire, cuyo movimiento condiciona el surgimiento y la desaparición de las cosas.

Otro filósofo griego que hizo grandes aportes a la doctrina materialista fue Heráclito de Éfeso (ca. 530 - 470 a. C.) el cual tomó como sustancia primaria el fuego. Sostenía la existencia en la eternidad del mundo, independientemente de cualesquiera de las fuerzas sobrenaturales, como un fuego eternamente vivo, que con orden regular se enciende y con orden regular se apaga. Subrayaba la idea del movimiento y cambio constante del mundo, de la contradicción como fuente de movimiento, de la posibilidad de transformación recíproca de los contrapuestos. Expresó ideas sobre los principios dialécticos, que reflejan de una u otra manera el estado verdadero de las cosas, aunque no sostenidas por conocimientos científicos.

El desarrollo más profundo de la corriente materialista en la Grecia Antigua se ve en la doctrina de Demócrito de Abdera (460 - 370 a. C.), que promovió la teoría atomista de la estructura de la materia. Según esta teoría, el principio cardinal del mundo es la existencia del vacío y los átomos que se mueven en el vacío, encontrándose y formando diferentes cuerpos e incluso el alma del hombre, la cual muere al perecer el organismo.

Finalmente dentro de la corriente materialista aunque un tanto más inconsecuente encontramos al filósofo griego Aristóteles (384 - 322 a. C.) el cual sostenía que todas las cosas tenían en su base una materia prima, que se caracterizaba por la falta de determinación, de forma, es decir, no eran sino una posibilidad de existencia. Esta posibilidad se convierte en cosa verdadera sensible sólo cuando la materia se une con una u otra forma que le da su determinación. Esta concepción, si bien es materialista en su esencia, tiene graves insuficiencias porque separa la materia primaria del movimiento, que es introducido por la forma desde fuera, además de que su transición de un estado indeterminado a determinado toma su origen a fin de cuentas de los dioses, que vienen a ser el primer propulsor.

Esta concepción, a la par con los elementos de la dialéctica y las tendencias materialistas, contiene también rasgos metafísicos y tendencias idealistas.

Después de Aristóteles se observa una decadencia condicionada por la crisis general que vive el Estado Griego, perfilándose una transición del materialismo al idealismo y al misticismo.

Materialismo de la época del Renacimiento [editar]

Italia fue el primer país en el que comenzaron a desarrollarse las relaciones capitalistas. Desde el punto de vista económico, la región más desarrollada era el norte, con sus repúblicas marítimas comerciales de Venecia y Génova, y la industrial de Florencia. En el centro de la atención de los pensadores avanzados de la época quedó la persona humana. Los ideólogos de la burguesía ascensional que necesitaba la libertad de desplazamiento, la libre empresa y la libertad de comercio, soñaban con liberar al hombre del despotismo feudal.

Esta nueva dirección de la cultura fue denominada «humanismo» (del latín humanus, ‘humano’). La vieja sentencia de «soy hombre y nada humano me es ajeno» se convirtió en la divisa de los humanistas. La particularidad del pensamiento filosófico del Renacimiento es su carácter antiescolástico. Debe tenerse en cuenta que la escolástica, tanto por el lado de la Iglesia como del Estado, fue durante toda la Edad Media la filosofía oficial y se impartió en la mayoría de las universidades. A diferencia de la escolástica, la filosofía de los humanistas dejó de ser sirvienta de la teología. En oposición a la escolástica y a la teología de la Edad Media comenzó a desarrollarse en Italia la filosofía materialista.

Dos filósofos italianos [editar]

Bernardino Telesio (1509-1588) dio un importante paso en el desarrollo de la filosofía de Italia. Fundó una academia filosófica en la que por oposición al aristotelismo medieval se propagaba el estudio empírico de la naturaleza. Su principal obra se titula De la naturaleza de las cosas conforme a sus propios principios. En lo fundamental era materialista y sostenía que existe objetivamente la materia eterna e inmutable, homogénea, increada e indestructible. Pero, al mismo tiempo, se inclinaba hacia la idea de que todas las fuerzas de la naturaleza están animadas. Como fuente del movimiento de la materia, Telesio señalaba la oposición del calor y del frío.

El gran pensador italiano Giordano Bruno (1548-1600) sacó conclusiones profundamente materialistas y ateas de la teoría heliocéntrica de Copérnico. Nació en Nola (cerca de Nápoles). A los quince años entró en la orden de los dominicos. Gracias a su esfuerzo tenaz e independiente se convirtió en uno de los hombres más cultos de su tiempo.

Por sus ideas avanzadas fue acusado de herejía y excomulgado. Viose obligado a huir de Italia y, durante largos años, tuvo que vagar por Suiza, Francia, Inglaterra y Alemania, difundiendo en todas partes su concepción materialista del universo.

En 1592 regresó a Italia, donde fue capturado por la Inquisición y arrojado a la cárcel. Pese a las torturas que sufrió, no se retractó de sus convicciones, siendo condenado a muerte. «Tenéis más miedo al pronunciar mi sentencia que yo al escucharla», dijo Bruno dirigiéndose a sus verdugos. Finalmente, el 17 de febrero de 1600 fue quemado vivo en la Plaza de las Flores (en Roma).

Sus obras principales son: La cena de las cenizas (1584), De la causa, principio y uno (1584), Del infinito, del universo y los mundos (1584), Del triple mínimo y de la medida (1591), De lo inmenso y de los innumerables (1591), De la mónada, del número y de la figura (1591). En su libro titulado La expulsión de la bestia triunfante (1584) desenmascara al papado y a la religión católica. Su obra El misterio de Pegaso, con el anexo del asno de Killen (1586), constituye una brillante y cáustica sátira contra los escolásticos y teólogos medievales.

Según el pensamiento de Giordano Bruno:

  • La naturaleza es infinita;
  • El Sol no es el centro del universo sino tan solo el centro de nuestro sistema planetario;
  • No sólo el Sol tiene planetas sino también las otras estrellas;
  • Todo el universo es homogéneo; es decir, tiene las mismas sustancias de la Tierra;
  • Todos los otros planetas también están poblados;
  • La materia es madre y alumbradora de todas las cosas y capaz de producir infinitamente nuevas y nuevas formas;
  • El hombre es parte inseparable de la naturaleza, es el microcosmos que refleja el macrocosmos;
  • Admite los grados del conocimiento que había establecido Nicolás de Cusa: los sentidos, el entendimiento y la razón. Aunque le otorga la prioridad a la razón;
  • El entender el universo como infinitud conduce al filósofo italiano a la «dialéctica de la coincidencia de los opuestos», tanto en lo infinitamente grande como en lo infinitamente pequeño.

Materialismo metafísico (mecanicista). ss. XVII y XVIII [editar]

(Galileo Galilei, Francis Bacon, Thomas Hobbes, P. Gassendi, J. Locke, B. Spinoza).

Con el surgimiento de la relaciones capitalistas de producción, se fomenta la producción, se despliega la industria y el comercio, lo cual requiere el conocimiento concreto de la leyes del mundo circundante y aparece la necesidad de estudiar e indagar la naturaleza. Esto le da un impulso a la filosofía la cual se proclama como ciencia llamada a averiguar las verdades que ayudan en la vida práctica y orientan la creación de valores materiales, se declaran falsos los postulados de la filosofía medieval y a su método por la inducción a errores y se ofrecen nuevos medios de investigación y métodos para conocer la verdad.

Uno de los principales filósofos de esta corriente fue Francis Bacon (1561-1626), quien criticó duramente la filosofía idealista, empezando por la Antigüedad y llegando hasta el Medioevo, por haberse convertido en sirviente de la teología y haber llegado a fundamentar sus tesis con dogmas religiosos, por su carácter especulativo, la vacuidad y la inconsistencia de sus postulados. Bacon consideraba la experiencia como fundamento del proceso de conocimiento si se libraba al hombre y a su conciencia de todo tipo de prejuicios. Defendía el mundo material infinito y eterno siendo una de sus propiedades fundamentales el movimiento, que Bacon reducía a unas cuantas formas.

Al método de Bacon le son inherentes asimismo la metafísica y el mecanicismo, pues entendía que los objetos eran una combinación mecánica de ciertas cualidades permanentes y que podían ser entendidos mediante la unificación mecánica de los datos sobre sus diversos aspectos. Pese a sus insuficiencias, la doctrina de Bacon fue un considerable paso adelante en el desarrollo del pensamiento filosófico y marco la aparición de una nueva forma de materialismo filosófico, el materialismo metafísico.

La doctrina materialista continuó desarrollándose por filósofos como Thomas Hobbes (1588-1679), quien entendía que la naturaleza representa una totalidad de cuerpos que poseen dos propiedades principales: extensión y figura, y reducía la variedad de movimiento al movimiento mecánico, entendiendo como movimiento la traslación de los cuerpos en el espacio. Estableció como único método científico del saber el matemático, sostenido en las operaciones de sumar y restar.

Muchos años más tarde, tenemos a Pierre Gassendi, representante de la tradición materialista, quien se oponía a los intentos de René Descartes para basar las ciencias naturales en fundaciones dualistas.

Materialismo francés del siglo XVIII [editar]

(J. La Mettrie, C. Helvecio, P. Holbach, D. Diderot)

Algunos otros materialistas serían, Denis Diderot y algunos pensadores de la Ilustración alemana como Ludwig Feuerbach (siglo XIX).

Materialismo antropológico [editar]

Materialismo de los revolucionarios rusos [editar]

(Visarión Belinski, Aleksandr Gertsen, N. Chernishevski, N. Dobroliúbov).

Creado a mediados del siglo XIX por Karl Marx y Friederich Engels y desarrollado posteriormente por Vladimir Ilich "Lenin" en la nueva situación histórica. Marx y Engels, volteando la dialéctica idealista de Georg Hegel "de arriba hacia abajo", proveyeron al materialismo con un proceso de cambio cuantitativo y cualitativo llamado materialismo dialéctico, y con una visión materialista de la historia, conocida como materialismo histórico.

El concepto no afecta sólo a la visión filosófica del mundo sino también a la ciencia. Aunque en las ciencias naturales los enfoques no-materialistas quedaron descartados hace mucho tiempo, en ciencias sociales ha existido en los últimos siglos una polémica entorno al materialismo como enfoque de investigación. Así Karl Marx propuso un enfoque materialista de la historia, que se conoció como materialismo histórico sobre el que aún existe cierta polémica. Más recientemente Marvin Harris propuso una enfoque de investigación materialista de las culturas y las sociedades llamado materialismo cultural. E, incluso, Paul y Patricia Churchland han promovido una forma extrema de materialismo, conocida como materialismo eliminativo que sostiene que los fenómenos mentales en realidad no existen y que hablar de los reflejos mentales, como se hace en psicología popular es algo así como dar crédito a las enfermedades causadas por el diablo.

El materialismo también ha sido entendido frecuentemente como una forma enteramente científica y racionalista de ver el mundo, particularmente por pensadores religiosos que se le oponen y por marxistas. El materialismo como principio filosófico o científico típicamente contrasta con el dualismo, la fenomenología, el idealismo y el vitalismo. También es usado como una etiqueta peyorativa para un estilo de vida que busca riqueza, dinero y comodidades, en lugar del desarrollo espiritual o mental.

La definición de «materia» en el materialismo filosófico moderno comprende a todos los entes científicamente observables, como la energía, fuerzas y la curvatura del espacio. Muchos autores del siglo XX, particularmente epistemólogos y filósofos de la ciencia, prefieren la denominación de fisicalismo porque carece tanto de las connotaciones emocionales de la palabra «materialismo» como de las restricciones históricas asociadas a éste. Enfatiza lo físico, sea materia o energía.

DOGMA: AGNOSTICISMO. El agnosticismo (del griego α- a-, sin + γνώσις gnōsis, conocimiento) es aquella postura filosófica o personal que, a grandes rasgos, considera inaccesible para el ser humano todo conocimiento de lo divino y de lo que trasciende o va más allá de lo experimentado o experimentable. El agnosticismo es una doctrina basada en observaciones y experiencias, y por lo tanto declara como inaccesible todo fenómeno que escape de la experimentación o reproducibilidad. En otras palabras, para un agnóstico, el valor de verdad de ciertas afirmaciones (particularmente las metafísicas respecto a la teología, el más allá, la existencia de Dios, dioses, deidades, o una realidad última) es incognoscible o, dependiendo de la variante de agnosticismo, imposible de adquirir su conocimiento debido a la naturaleza subjetiva de la experiencia.

Agnosticismo

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No confundir con gnosticismo.
Mapa porcentual de ateos y agnósticos a nivel mundial, Actualización del Mapa de Zuckerman 2006.

El agnosticismo (del griego α- a-, sin + γνώσις gnōsis, conocimiento) es aquella postura filosófica o personal que, a grandes rasgos, considera inaccesible para el ser humano todo conocimiento de lo divino y de lo que trasciende o va más allá de lo experimentado o experimentable. El agnosticismo es una doctrina basada en observaciones y experiencias, y por lo tanto declara como inaccesible todo fenómeno que escape de la experimentación o reproducibilidad. En otras palabras, para un agnóstico, el valor de verdad de ciertas afirmaciones (particularmente las metafísicas respecto a la teología, el más allá, la existencia de Dios, dioses, deidades, o una realidad última) es incognoscible o, dependiendo de la variante de agnosticismo, imposible de adquirir su conocimiento debido a la naturaleza subjetiva de la experiencia.

En algunas versiones (como el agnosticismo débil) esta falta de certeza o conocimientos es una postura personal relacionada con el escepticismo. En otras versiones (como el agnosticismo fuerte) se afirma que el conocimiento sobre la existencia o no de seres superiores no sólo no ha sido alcanzado sino que es inalcanzable. Finalmente hay versiones (apateísmo) en las cuales se afirma que la existencia o no de seres superiores, no sólo no es conocida sino que es irrelevante. En general, los agnósticos consideran que las religiones no son una parte esencial de la condición humana, pero sí de la cultura y de la historia humana.

Icono popular del Agnosticismo.

Quienes profesan el agnosticismo no son necesariamente antirreligiosos, siendo el tipo ideal de agnóstico respetuoso con todas las creencias que proceden de una reflexión individual y honesta. El agnóstico entiende las creencias sobrenaturalistas sólo como una opción personal de cada individuo, que él no comparte.

Los servicios de investigación demográfica normalmente incluyen a los agnósticos en la misma categoría que los ateos y personas no religiosas, aunque esto puede ser engañoso dependiendo del número de agnósticos teístas que se identifican primero como agnósticos y en segundo lugar como seguidores de una religión particular.

En pocas palabras, el agnóstico no niega la existencia de un dios, sólo dice que ésta no es demostrable.

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Etimología [editar]

El término Agnóstico fue introducido por Thomas Henry Huxley en 1871 para describir su filosofía que rechaza el gnosticismo, por el cual no rechazaba sólo a ese grupo religioso del primer milenio, sino a todos los grupos que afirmaban tener un conocimiento oculto o místico.

Los primeros líderes de la iglesia cristiana utilizaron la palabra griega "gnosis" (conocimiento) para describir el “conocimiento espiritual.” El agnosticismo no debe ser confundido con las visiones religiosas que se oponen a la doctrina del gnosticismo - éstos son conceptos religiosos que no se relacionan generalmente con el agnosticismo. Huxley utilizó el término en un sentido amplio. No debe confundirse con Nosticismo.-

Definición según Thomas Henry Huxley [editar]

En el libro "Aphorisms and Reflections" escrito por Henrietta A. Huxley, esposa de Thomas Henry Huxley, ella recoge múltiples volumenes de notas y ensayos del señor Huxley ,[1] quien acuñó el término "Agnosticismo". En dichas notas se encuentra un parrafo donde Thomas Henry Huxley define con claridad lo que significaba el término para él:

Agnosticismo, de hecho, no es un credo, sino un método, la escencia en la que se sustenta la aplicación rigurosa de un solo principio. [2]

Y más adelante en el mísmo párrafo:

El principio puede ser expresado positivamente: En asuntos intelectuales, sigue tu razón tan lejos como te lleve sin importar ninguna otra consideración. Y negativamente: En asuntos intelectuales, no pretendas que son ciertas las conclusiones que, o no son demostrables, o no han sido demostradas. Esto entiendo como signíficado de la fé Agnóstica, que si un hombre mantiene completa e incorrupta, no deberá sentir verguenza de mirar al universo a la cara, cualquiera que sea el futuro deparado para él. [3]

Variaciones y tipos de agnosticismo [editar]

El agnóstico suele separar las posturas religiosas entre "conocer" y "creer". Para él, una persona religiosa se distingue de una atea por el hecho de que el religioso "cree" y el ateo "cree que no". Así, el agnóstico se aparta de estas posturas indicando que unos y otros (religiosos y ateos) afirman un nivel de conocimiento sobre la realidad superior que él no comparte. En cambio, para el religioso no se puede hacer esta separación: la afirmación "creo en Dios" implica "conozco que Dios existe".

 

 Cree que existe al menos un diosCree que los dioses no existenNo tiene opinión alguna sobre la existencia de los diosesCree que los dioses son irrelevantes
Cree que se puede probar su (no) existencia, y se conoce alguna pruebaDeísmoAteísmo fuerteAteísmo débilApateísmo
Cree que se puede probar su (no) existencia, pero actualmente no se conoce ninguna pruebaDeísmo // Agnosticismo débilAteísmo fuerte // Agnosticismo débilAteísmo débil // Agnosticismo débilApateísmo // Agnosticismo débil
Cree que no se puede probar su (no) existenciaDeísmo // Agnosticismo fuerteAteísmo fuerte // Agnosticismo fuerteAteísmo débil // Agnosticismo fuerteApateísmo // Agnosticismo fuerte
Cree que las pruebas de (no) existencia son irrelevantesApateísmo // TeismoApateísmo // Ateísmo fuerteApateísmo // Ateísmo débilApateísmo // Posiblemente Ateísmo débil


Algunas variantes del agnosticismo incluyen:

  • Agnosticismo fuerte: es una afirmación categórica sobre el conocimiento de realidades superiores indicando que estas no son cognoscibles, y que los seres humanos no están equipados para descubrir la existencia de tales realidades o para probar su inexistencia.
  • Agnosticismo débil: se considera una opción personal. Es la persona que afirma que no tiene conocimiento o certeza sobre la realidad superior.
  • Agnosticismo apático: conocido también como apateísmo es la visión de que las realidades superiores, aún de existir, no cambian en nada a la condición humana y por lo tanto las religiones son irrelevantes o accesorias.
  • Agnosticismo interesado: aquel que considera que el conocimiento de la existencia de deidades es relevante para el ser humano, en oposición al Agnosticismo apático, que considera lo contrario. Por lo general este interés se justifica argumentando la gran relevancia que tendría tanto la existencia de deidades, como su inexistencia para el papel que desempeña el hombre en el mundo.
  • Agnosticismo modelo: apunta a que las preguntas filosóficas y metafísicas no son verificables fehacientemente sino un modelo maleable de pensamiento que debe basarse sobre la racionalidad. Esta rama del agnosticismo no se enfoca en la existencia de deidades.
  • Ignosticismo: Algunos filósofos han visto el ignosticismo como una variación de ateísmo o agnosticismo, mientras que otros han considerado que es distinto. Según las definiciones de Theodore Drange los ignósticos no son ni ateos ni agnósticos. Una simplificación máxima en la materia establece que un ateo diría, "No creo que Dios exista", un agnóstico diría, "No sé si Dios exista o no", y un ignóstico diría que, "No sé qué se quiere decir cuando se dice Dios existe".

Algunas opiniones filosóficas [editar]

Entre los más famosos agnósticos (en el sentido original) se encuentran Thomas Henry Huxley, Thomas Alva Edison, Charles Darwin, Marie Curie y Bertrand Russell. A partir de los trabajos de David Hume, especialmente Dialogues Concerning Natural Religion (Diálogos con respecto a la religión natural), se piensa que él era agnóstico, aunque es un tema que sigue en debate.

La posición agnóstica es visible en varios filósofos post-kantianos, que mantienen que la razón que pretende hablar de lo incondicionado cae en contradicción, tanto para demostrar la existencia de Dios como para negarla.

Thomas Henry Huxley [editar]

Thomas Henry Huxley.

Las posturas agnósticas son tan antiguas como el escepticismo filosófico, pero el término «agnosticismo» fue acuñado por el biólogo Thomas Henry Huxley (abuelo del conocido novelista inglés Aldous Huxley) en una reunión de la Sociedad Metafísica en 1869. En ella definió a los agnósticos como a las personas que niegan tanto el ateísmo como el teísmo y que aseguran que no es posible hallar respuesta a la duda metafísica de la existencia de un poder superior o Dios. En una carta a un amigo escribe:

Yo no afirmo ni niego la inmortalidad del hombre. No veo razón para creer en ella pero tampoco tengo ningún medio para desaprobarla. No tengo objeciones a priori a esa doctrina. Nadie que tenga que lidiar día a día con la naturaleza puede meterse en el brete de las dificultades a priori. Dame alguna evidencia que justifique mi creencia en cualquier cosa y yo creeré. ¿Y cómo no habría de creer? No sería más maravilloso que la conservación de la energía o la indestructibilidad de la materia. [...] No tiene sentido que me hables de analogías y probabilidades. Yo sé a qué me refiero cuando digo que creo en la ley de los cuadrados inversos, y no basaré mi vida y mis esperanzas en alguna convicción más débil.
Huxley, en carta a Charles Kingsley del 23 de septiembre de 1860

Desde entonces el término 'agnóstico' también ha sido usado para designar aquella persona que, aunque no considera que sea incognoscible la existencia de Dios, cree que las evidencias a favor y en contra de la existencia de una deidad no resultan concluyentes, por lo que se muestra indecisa sobre el tema.

Por naturaleza tengo la antipatía más grande posible contra el ateísmo. Y sin embargo sé que yo —a pesar de mí mismo— soy exactamente lo que un cristiano llamaría un ateo. No puedo ver ni una sombra de evidencia acerca de que lo desconocido que se esconde tras los fenómenos del universo tenga algo que ver con nuestra relación con un Padre que nos ama y nos cuida, como dicen los cristianos. Así que con respecto a los demás dogmas cristianos —como la inmortalidad del alma y el castigo y recompensa futuros— ¿qué voy a objetar yo —que me siento compelido a creer en la inmortalidad de lo que llamamos materia y energía y a creer en un inconfundible estado actual de castigos y recompensas por nuestras acciones— qué voy a objetar contra esas doctrinas? Dame una pizca de evidencia y estoy listo para saltar a tu lado.
Huxley, en carta a Charles Kingsley del 6 de mayo de 1863

Con respecto al origen del término «agnóstico» para describir su actitud, Huxley da la siguiente explicación:

Por eso inventé el título que me pareció más apropiado: «agnosticismo». Me vino a la cabeza como la antítesis del gnosticismo que apareció al principio de la historia de la iglesia. Los gnósticos pretendían saber tanto justamente acerca de las cosas que yo más ignoro. Para mi gran satisfacción el término tuvo éxito.
Huxley, Ensayos escogidos, pág. 237-239.

Se considera que el agnosticismo de Huxley es una consecuencia natural de las condiciones intelectuales y filosóficas de 1860, en que la intolerancia religiosa estaba tratando de impedir los descubrimientos científicos que parecían chocar contra una lectura literal de la Biblia (en especial del libro del Génesis) y otras doctrinas cristianas establecidas. Sin embargo el agnosticismo no se debe confundir con el deísmo, el panteísmo u otras formas científicas positivistas de teísmo.

En temas intelectuales, sigue tu razón tanto como puedas, sin tener ningún otro tipo de consideración. Y negativamente: en temas intelectuales, no finjas que es cierta ninguna conclusión que no haya sido demostrada o sea demostrable.
Huxley, Agnosticismo, 1889

Charles Darwin [editar]

Retrato de Charles Darwin por Julia Margaret Cameron

En 1879, cuando Darwin estaba escribiendo su autobiografía, le llegó una carta preguntándole si él creía en el Dios Yahvé, y si el teísmo y la evolución eran compatibles. Él replicó que «un hombre puede ser un ardiente teísta y un evolucionista», citando como ejemplos a Charles Kingsley y Asa Gray; con respecto a él, dijo que «nunca había sido ateo en el sentido de negar la existencia de un Dios». Agregó: «Creo que en general (y más cuanto más viejo me hago) aunque no siempre, creo que "agnóstico" sería una descripción correcta de mi pensamiento».

El jueves 28 de septiembre de 1881 Darwin recibió la visita de dos conocidos ateos: Ludwig Büchner y Edward Aveling. Estaba presente Brodie Innes, un religioso amigo de la familia.

Darwin explicó sagazmente que «el reverendo y yo hemos sido medio amigos por treinta años. Nunca hemos estado de acuerdo en ningún tema: más bien nos miramos y cada uno piensa que el otro debe estar muy enfermo». En la charla después de la cena, Darwin les preguntó a sus invitados: «¿Por qué se hacen llamar ateos?», explicando que él prefería la palabra agnóstico. Aveling replicó que «un agnóstico no era sino un ateo elástico, y un ateo no era sino un agnóstico agresivo». Darwin respondió: «¿Y por qué tienen que ser tan agresivos?», preguntándose qué iban a ganar imponiendo esas nuevas ideas en la gente, cuando la libertad de pensamiento estaba «más que bien» para las personas educadas, pero si la gente ordinaria «estaría madura para ello».

Aveling respondió que si «las revolucionarias verdades de la selección natural y sexual hubieran sido confinadas sólo para las pocas personas sensatas» y él «habría demorado la publicación del Origen de las especies, ¿dónde estaría el mundo en este momento?». Seguramente su propio ilustrativo ejemplo había alentado a los librepensadores a «proclamar la verdad desde los techos de las casas». Darwin en ese momento aceptó que «el cristianismo no está apoyado en evidencias», pero que él no estaba dispuesto a forzar esa idea en nadie, ya que de hecho «yo no abandoné el cristianismo hasta que tuve cuarenta años de edad».

Bertrand Russell [editar]

El panfleto de Bertrand Russell Por qué no soy cristiano, basado en una conferencia que dio en 1927, se considera un manifiesto clásico de la creencia agnóstica. El ensayo presenta brevemente las objeciones de Russell a algunos de los argumentos sobre la existencia de Dios y del átomo, como herencia extraterrestre y luego presenta una discusión acerca de sus objeciones morales a las enseñanzas cristianas. Luego le pide a sus lectores que se paren «sobre sus dos pies y dirijan una mirada cruda y directa al mundo [...] con una actitud sin miedo y una inteligencia libre».

En el otro panfleto posterior de Russell ¿Soy ateo o agnóstico? (subtitulado «Un ruego de tolerancia ante los nuevos dogmas»), él confirma que es un agnóstico en el sentido filosófico de que no puede creer la verdad de la existencia o no existencia de Dios. Sin embargo en el mismo ensayo admite que la manera más clara de presentarse ante una audiencia no filosófica sería como ateo.

Agnósticos Famosos [editar]

Entre algunos agnósticos famosos encontramos a: David Hume, Warren Buffett, Protágoras, Carl Sagan, Karl Popper (filósofo), naturalistas como David Attenborough, Premio Nobel como Milton Friedman (economía) y Francis Crick (medicina), y creadores como Matt Groening (Los Simpson), Bob Reynols, Ozzy Osbourne, la actual Presidenta de Chile, Michelle Bachelet, King Diamond Mercyful Fate.

Véase también [editar]

Notas [editar]

  1. Huxley, Henrietta A.. «Prefasio», Aphorisms and Reflections, Parrafo 3, p. 12. ISBN 1419107305.
  2. Huxley, Henrietta A.. «Prefasio», Aphorisms and Reflections, CXLII [C.E.v 245], Al final de la página, p. 41. ISBN 1419107305.
  3. Huxley, Henrietta A.. «Prefasio», Aphorisms and Reflections, CXLII [C.E.v 245], Al inicio de la página, p. 42. ISBN 1419107305.

DOGMA: DOGMATISMO (FILOSOFÍA). El dogmatismo es aquella corriente filosófica contrapuesta al escepticismo y al idealismo, que haciendo derivar el pensamiento del ser, presupone la supremacía del objeto respecto al sujeto, de la realidad de las ideas, de la naturaleza del espíritu. Dios mismo es concebido eminentemente en la naturaleza, e identificado por tanto como un todo que contiene hasta lo último (panteísmo).

Dogmatismo (filosofía)

De Wikipedia, la enciclopedia libre

El dogmatismo es aquella corriente filosófica contrapuesta al escepticismo y al idealismo, que haciendo derivar el pensamiento del ser, presupone la supremacía del objeto respecto al sujeto, de la realidad de las ideas, de la naturaleza del espíritu. Dios mismo es concebido eminentemente en la naturaleza, e identificado por tanto como un todo que contiene hasta lo último (panteísmo). No se trata de un simple materialismo, puesto que Dios es naturaleza, por tanto unidad indisoluble, también visto como una unidad complementaria: la naturaleza soltando manifestación concreta y tangible del Dios, que sin embargo vive exclusivamente en ella, siendo esencial para conforme a objeto convertido de si igual, que está al objeto. El tema en hecho se forma solamente como tales la conexión con un objeto. Y el objeto en su vuelta es siempre solo objeto de un tema. De él alcanza la correspondencia entre las estructuras íntimas de la verdad, y eso del intelecto. El mayor exponente del dogmatismo se considera Spinoza. Se encuentra otra vez también en el estoicismo.

De modo general, el dogmatismo es una especie de fundamentalismo intelectual. Los dogmas expresan verdades ciertas, indudables que no son sujetas a cualquier tipo de revisión o crítica. Así lo expresa el filósofo alemán Immanuel Kant (1724 - 1804) en su obra Crítica a la Razón Pura, el significado filosóficamente peyorativo de tiempo. Dogmatismo es una actitud natural y espontánea que tenemos desde que somos niños. Y nuestra creencia de que el mundo que existe es exactamente de la forma que lo percibimos.

DOGMA: Un dogma es una doctrina sostenida por una religión u otra organización de autoridad y que no admite réplica, es decir, es una creencia individual o colectiva no sujeta a prueba de veracidad, cuyo contenido puede ser religioso, filosófico, social, sexual, etc., impulsado por una utilidad práctica. La enseñanza de un dogma o de doctrinas, principios o creencias de carácter dogmático se conoce como adoctrinamiento.

Dogma

De Wikipedia, la enciclopedia libre

Para otros usos de este término, véase Dogma (desambiguación).

Un dogma es una doctrina sostenida por una religión u otra organización de autoridad y que no admite réplica, es decir, es una creencia individual o colectiva no sujeta a prueba de veracidad, cuyo contenido puede ser religioso, filosófico, social, sexual, etc., impulsado por una utilidad práctica. La enseñanza de un dogma o de doctrinas, principios o creencias de carácter dogmático se conoce como adoctrinamiento.

En su origen el término podía significar también una norma o decreto emitido por una autoridad, o una opinión característica de una escuela filosófica. Con el crecimiento de la autoridad de la Iglesia, la palabra adquirió el que ahora es su significado principal, dogma teológico, del que derivan, por analogía, el resto de los usos habituales. Serían así dogmas no sólo las llamadas verdades de la religión católica, sino las de cualquier otra religión, o cualquier otra creencia que es proclamada verdad indiscutible.

Contenido

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Dogmas en la religion [editar]

Judaísmo [editar]

En el judaísmo, fue Saadia Gaon quien por primera vez sistematizó la fundamentación de las verdades, o dogmas, de la tradición, estableciendo a la vez la racionalidad del judaísmo y la prioridad de la tradición sobre la razón filosófica y la investigación. Su obra Emunot ve deot (‘Creencias y doctrinas’) fue titulada originalmente Libro de los artículos de fe y las doctrinas dogmáticas.

Los elementos fundamentales del judaísmo son la creencia en un solo Dios y en la elección de Israel para guiar al mundo.

El Estado de consagración a Dios se manifiesta por los objetos que se utilizan en la plegaria: el taled, que es un manto con flecos, que señala que el fiel está revestido de dicha consagración. Los tefillin, pequeñas cajas de cuero que se atan en la frente. Además, estas cajas, contienen unos manuscritos de pergamino de determinados pasajes de la escritura.

Las mujeres no son apartadas del culto, pero están dispensadas a causa de sus deberes especiales de amas de casa.

Cristianismo [editar]

Cristianismo ortodoxo [editar]

Para la mayoría del cristianismo oriental los dogmas están contenidos en el Símbolo Niceno y los cánones de los Concilios Ecuménicos primero, tercero o séptimo según la iglesia. La Iglesia Católica mantiene como dogmas además los cánones de otros catorce concilios ecuménicos y los pronunciamientos del Papa. Los pronunciamientos papales son considerados "dogmáticos" cuando son expresados "ex cátedra", es decir, desde su función de Papa, y por tanto en concordancia con la Iglesia, que delega su voz y voto, en los obispos (episcopos, vale decir los que están en lugar de...) y cardenales. De otro modo, un pronunciamiento papal no es dogma, en la medida que no se cumplan esas condiciones. La última vez que un Papa habló en forma dogmática, fue cuando se pronunció sobre la ascensión de María.

Catolicismo [editar]

En la doctrina católica, un dogma es la adhesión irrevocable a verdades contenidas en la Revelación divina o verdades que tienen con ellas un vínculo necesario. Sin embargo la Iglesia tiene una posición muy clara con respecto al dogma, y es que las verdades divinas siempre han existido, solo que cuando se tiene un escollo, por ejemplo una duda, o una desviación doctrinal, es necesario reafirmarla por medio de un dogma. Por ejemplo: todo cristiano ha reconocido a Jesucristo como hijo de Dios, ahora bien, cuando se dio una desviación doctrinal sobre la naturaleza divina de Jesucristo, fue necesario hacer un artículo de fe, que determinara y zanjara una situación, de manera que ya no habrá dudas, sino que se determinará como una verdad. Es importante señalar que un católico puede disentir de un dogma y seguir siendo católico, en la medida que lo haga en plena conciencia y sin influir en otros para que sigan su interpretación, del mismo modo las reglas u orientaciones que la Iglesia dicta, o el propio Papa en forma de encíclica (Carta Universal que no es dogma) o los obispos locales, son "orientaciones", pero no devienen en obligatoriedad como señalan facciones como el "Opus Dei", un precepto aceptado y considerado fundamental en la vivencia del catolicismo está en la libertad de conciencia del sujeto que actúa, por ello, medidas como la prohibición de la hostia para separados, la ex-comunión de facto proclamada por prelados de una determinada localidad no tienen real efecto. Es el caso de la excomunión de las mujeres que usaban bikini en los años 60 en la localidad de Viña del Mar en Chile. La misión de la Iglesia es la de anunciar e instaurar entre todos los pueblos el Reino de Dios inaugurado por Jesucristo, por tal motivo es quien interpreta la revelación de Dios. Véanse los Dogmas de la Iglesia Católica Apostólica Romana. Corrijo lo anterior sin eliminarlo: la misión de la Iglesia es profética y sacerdotal, lo que se explicita (o debería hacerse)en el bautizo por el ministro. La misión profética es doble, en primer lugar anunciar la venida del Reino de Dios, del cual somos instrumentos aunque no lo sepamos y en segundo lugar, denunciar todo aquello que contradiga el espíritu de la fe, como la violencia, la tortura o la pobreza. Dado eso es claro que clérigos no siempre cumplen su labor, por tanto es propio y obligación de un católico practicante actuar en el contexto privado o público en que no se respete lo esencial de la doctrina que ha quedado establecida definitivamente por Jesucristo mismo, por tanto, no hay lugar a interpretaciones posteriores como lo pretenden algunas agrupaciones.

La misión sacerdotal tiene que ver con la capacidad del bautizado de ejercer su soberanía de bendecir (jamas de maldecir) a los cercanos y lejanos en su cotidianeidad, misión que antiguamente realizaba el padre respecto de los hijos, ese es parte del valor del beso de despedida cuando un hijo sale de la casa.

Los laicos hemos aceptado u obviado nuestra responsabilidad profética y sacerdotal dejándola en manos de los clérigos, pero es un hecho que la Iglesia ha precisado de la presencia del Espíritu de Dios en el actuar de los laicos, cada vez que los clérigos se desvían del "querer" de Dios.

Protestantismo [editar]

En la teología protestante se distinguen frecuentemente verdades fundamentales, sin aceptar las cuales, no sería posible confesarse cristiano, esencialmente las declaradas en el Credo de los Apóstoles, y otras doctrinas, cuya aceptación sería optativa.

Islam [editar]

En el islam, los dogmas están contenidos en el Aqidah, término equivalente a credo. Consiste en una serie de artículos de fe que aparecen claramente definidos en el Corán, y sobre la verdad de los cuales las distintas tendencias doctrinales se muestran de acuerdo, aunque con diferencias en cuanto a su desarrollo e implicaciones.

La religión musulmana se apoya en cinco pilares fundamentales:

  • La profesión de fe: No hay más dios que Alá y Mohammad (p.y b.) es su profeta.
  • La oración: celebrada en comunidad o individualmente, cinco veces al día en dirección a La Meca con previa purificación (wudu).
  • La limosna: Recaudada como un impuesto calculado estrictamente en función de los beneficios anuales de cada persona y de los que de él dependen. Se destina al beneficio de los musulmanes menos favorecidos.
  • El ayuno: Durante el mes de Ramadán, no se debe ingerir alimento ni bebida y abstenerse de toda prácitca sexual durante las horas de sol.
  • La peregrinación a La Meca: Al menos una vez en la vida si se tienen medios que lo permitan.

Aparte de estos pilares del islam, existen una serie de normas que regulan la vida de los musulmanes.

  1. El gobierno es teocrático, todas las leyes están supeditadas al Corán, que hace las veces de constitución.
  2. Están prohibidos el alcohol y la carne de cerdo por considerarse impuros y perjudiciales.
  3. Hombres y mujeres son iguales, pero al tener los hombres más responsabilidades, ya que tienen que mantener económicamente a la familia, también tienen más derechos; un hijo, por ejemplo, hereda el doble que una hija.
  4. Un hombre tiene derecho a tener hasta cuatro esposas, pero siempre con consentimiento de las anteriores.
  5. Hombres y mujeres deben vestir y comportarse de forma decente y sencilla evitando atuendos que puedan incitar a pensamientos pecaminosos.

Hinduismo [editar]

El sistema de castas y el culto son dos aspectos muy importantes del hinduismo.

Los hindúes creen en la reencarnación (samsara), es decir, que ellos regresan a la vida otra vez como animales o como personas. También creen en el karma. Karma significa que el comportamiento en la vida anterior afecta el lugar de las personas en esta vida, y lo que hacen en esta vida determinará su lugar en la venidera. Si guardan las leyes de su casta, creen que nacerán de nuevo en una casta más alta. Creen que finalmente cesarán de vivir como personas para alcanzar el nirvana (convertirse en parte del dios Brahman, que no debe ser confundido con el dios Brahmá, de cuatro cabezas). Los renacimientos pueden continuar de manera interminable, ya que los hindúes nunca pueden estar seguros de haber hecho todo correctamente.

La mayoría de los hindúes son vegetarianos. Creen que los animales y los insectos tienen almas, y por lo tanto no comen carne ni quitan la vida si lo pueden evitar. Piensan que la vaca es especialmente sagrada, y por ello se les permite vagar libremente por las calles.

Budismo [editar]

Aunque el budismo no tiene dogmas que trate de imponer, tres conceptos importantes para entender el budismo son samsara, karma y nirvana.

Los budistas no buscan «evangelizar» a otras personas para que adopten su religión, pero sí ponen sus enseñanzas a la disposición de quien esté interesado. La gente tiene la libertad de tomar lo poco o mucho para lo que se sientan listos. Muchas personas toman las practicas de la meditación o la filosofía de vida del Budismo para mejorar sus vidas sin ser estrictamente budistas.

Dogmatismo fuera de la religión [editar]

Por extensión, el término dogmatismo designa la tendencia a erigir fórmulas que expresan conocimientos en verdades indiscutibles, al margen del estudio, de la crítica y del debate.

En algunas oportunidades, muchas creencias no religiosas son descritas como dogmas en campos como la política, la filosofía y los temas sociales. El término dogmático conlleva en su significado que dicha creencia es llevada de forma acrítica y conformista, y tiene connotaciones negativas. Los dogmas, por otra parte, son vistos como la antítesis del pensamiento analítico científico debido a que la mayoría de los dogmas religiosos pueden ser rehusados si son analizados a fondo.

También puede verse el uso peyorativo del concepto cuando se quiere hacer ver que una tesis no tiene fundamento real, y se la califica de dogmática.

La palabra «dogma», de origen griego, significa ‘doctrina fijada’. Para los primeros filósofos significó ‘opinión’. El dogmatismo, opuesto al escepticismo, es una escuela filosófica que «considera a la razón humana capaz de conocer la verdad, siempre que se sujete a métodos y orden en la investigación,dando por supuestas la posibilidad y la realidad del contacto entre el sujeto el objeto».

Véase también [editar]