.. Ya no hay marcha atrás. Una vez que todo empieza, se queda para siempre. Son las maneras de ver las cosas…cuando te contagia esta dulce enfermedad, no hay terapia que valga, eterna locura que amplia el alma,…la MÚSICA. Cada paso que damos, cada melodía encontrada, cada hora que pasa…es alimento para el bajo, batería, voz y guitarra. Esta es nuestra historia…hacia caminos inciertos a veces,… Cuando el asfalto se nos acabe el motor serán nuestros pies y la combustión nuestras canciones................................... Al principio todo era diferente. Distinto, ni peor ni mejor, simplemente diferente. Todavía nos acordamos de esos primeros ensayos juntos, cuando éramos cinco jóvenes con ganas de dedicarnos a la música y quemar los escenarios. Con la suficiente locura para invertir tiempo, sudor, lágrimas y sobre todo ilusión y ganas; cuando nos dejaban hacer ruido en un viejo caserío, con la madera algo envejecida y apolillada. Eran tiempos de inicio y aprendizaje, de algunas cervezas y canciones para coger experiencia. Uno de los momentos más difíciles fue, cuando el viejo caserío en el que ensayábamos fue derruido, sin nosotros saberlo, y con los instrumentos en sus interior. Fue duro, ya que había mucho dinero, sueños y recuerdos entre los escombros. Había que renacer de nuevo, y tras la depresión inicial retomamos el camino y buscamos nuevo local. Pasado algún tiempo ahorramos lo suficiente para comprar algún instrumento con el que ir tirando. Definitivamente este fue unos de los grandes baches en el camino.............................................. Un día de 2006 tuvimos nuestra primera baja. Se fue nuestro guitarrista rítmico, Ander, por motivos sentimentales a vivir a tierras escocesas. Fueron tiempos de asimilación y de acoplarnos a esta nueva situación. Logramos transportar las canciones a la formación de cuatro (voz, bajo, guitarra, batería). Pasó el tiempo y nos surgió de nuevo otro duro contratiempo. Nuestro cantante por aquel entonces, Rubén, decidió abandonar la banda por temas laborales. Decidió tomarse la vida de una forma más tranquila y disfrutar de la música pero desde otro punto de vista. Este fue nuestro punto de inflexión. Después de varios días de incertidumbre, decidimos seguir hacia delante los tres solos (Eneko, Asier y Pedro). A pesar del frío y de la nieve de aquellos días,…decidimos pasear desnudos por Siberia…y el frío sienta bien de vez en cuando! ;).................................................... Ahora somos tres, un presente inmejorable, una formación que sin quererlo nos lleva a entendernos sin mirarnos, a engranar nuestros diferentes gamas de colores preferidos; tres instrumentos en el directo, no hay más, lo que se oye es lo que se ve y lo que somos,..Somos la base y la cima de la pirámide (Eneko: voz y bajo, Asier: batería y coros, Pedro: guitarras)........................................................ Nos sentimos en la unión perfecta. El triángulo de las Bermudas, donde desaparecen los miedos y surge esta necesidad de crear y componer canciones. Simplemente hacemos lo que mas nos gusta en esta vida… convertir nuestros sentimientos en canciones, en cada ensayo se nos inunda la cara de gestos y risas. Nos lo pasamos tan bien! La música, al menos para nosotros, siempre hace ancho el camino, no hay peajes ni hay que hacer equilibrios. Ya no hay marcha atrás. Tan fácil y tan simple Seguiremos en este mundo de arquitectura musical, desde hoy y hasta el día de mañana. Somos conscientes que es complicado aparcar los sueños y mucho más hacerlos realidad, y aún “queriendo vivir en la cima de la montaña, sabemos que toda la felicidad pasa mientras la escalas.” Un gran abrazo para tod@s! VIVA LA MÚSICA! - elhombredeltiempo
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