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Pensamiento mágico2

PENSAMIENTO MÁGICO2: CANTO Y PENSAMIENO MÁGICO. El canto es la emisión controlada de sonidos del aparato fonador (voz), siguiendo una composición musical. El canto tiene un rol importante dentro de la música porque es el único medio musical que puede integrar texto a la línea musical.

Canto

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Para otros usos de este término, véase Canto rodado.

El canto es la emisión controlada de sonidos del aparato fonador (voz), siguiendo una composición musical. El canto tiene un rol importante dentro de la música porque es el único medio musical que puede integrar texto a la línea musical.

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Introducción [editar]

Hay diferentes técnicas de canto que se aplican según el estilo musical en que se canta. En la ópera se aplica la técnica del canto lírico (también bel canto), mientras que en el canto popular la pauta es lograr un sonido semejante al de la voz hablada.

En el ámbito del arte flamenco, se emplea la denominación de cantaor para referirse a los vocalistas musicales, mientras que cante se refiere a la acción de cantar cualquier canto popular andaluz o próximo.

Formación [editar]

La formación de cantante de ópera, cantante de musical o cantante de concierto en un conservatorio dura por lo menos 5 años. Para estudiar canto, un examen de admisión y un diagnóstico vocal son indispensables.

En la música popular, el cantante se forma comúnmente a través de experiencia práctica. Sin embargo, han surgido varias escuelas de canto popular en Europa, como la Popakademie Mannheim.

Estilos [editar]

Existen diferentes técnicas para cantar. Mientras que el cantante de ópera pretende llenar un auditorio sin ayuda técnica, en el canto popular comúnmente se utiliza un micrófono. Con el uso del micrófono, el cantante puede emitir un sonido semejante a la voz hablada sin preocuparse por el volumen.

Música clásica [editar]

En música clásica y en ópera los cantantes son clasificados, de acuerdo a su registro o tesitura, en:

Voces masculinas:

Voces femeninas:

Además existen tipos de voces masculinas que requieren una manipulación fisiológica (castración) ó un entrenamiento parcial del registro falsete:

Otros estilos [editar]

Véase también [editar]

PENSAMIENTO MÁGICO2: ENAMORAMIENTO Y PENSAMIENTO MÁGICO. El enamoramiento es un estado emocional surcado por la alegría y la satisfacción de encontrar a otra persona que es capaz de comprender y compartir tantas cosas como trae consigo la vida. Desde el punto de vista bioquímico se trata de un proceso que se inicia en la corteza cerebral, pasa al sistema endocrino y se transforma en respuestas fisiológicas y Cambios quimicos ocacionados en el hipotalamo mediante la segregacion de Dopamina.

Enamoramiento

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El enamoramiento es un estado emocional surcado por la alegría y la satisfacción de encontrar a otra persona que es capaz de comprender y compartir tantas cosas como trae consigo la vida. Desde el punto de vista bioquímico se trata de un proceso que se inicia en la corteza cerebral, pasa al sistema endocrino y se transforma en respuestas fisiológicas y Cambios quimicos ocacionados en el hipotalamo mediante la segregacion de Dopamina

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Elementos [editar]

  • Atracción:
  • Química: los psicólogos apuntan a que el amor, por lo menos en sus primeras fases, se abastece fundamentalmente de química. Una sustancia en nuestro cerebro denominada feniletilamina obliga la secreción de la dopamina o la norepinefrina, que por sus efectos se parecen a las “anfetaminas”, las cuales producen un estado de euforia natural cuando estamos con nuestra pareja.
  • Genética: al igual que el resto de animales, los humanos llevamos en nuestros genes el instinto de " procreación ", aunque los individuos pertenecientes al homo sapiens y muchas otras especies se relacionan sexualmente para mostrar su amor o para satisfacer su impulso sexual, no necesariamente para procrear. Científicos revelan que las sustancias químicas cerebrales se disparan en las primeras fases del amor, generando atracción y el deseo de estar juntos.

Teorías del enamoramiento [editar]

  • Imagen de pareja: afirman que nuestro aparato psíquico tiene guardada la imagen de la pareja que buscamos y que ésta despierta como una alarma cuando nos topamos con la persona que encaja con estos rasgos.
  • Correspondencia: buscamos a una persona de parecidos rasgos físicos, sociales, culturales, intelectuales, etc. con nuestra propia familia imaginaria...
  • Espejo: nos enamoramos de quien anhelamos ser o bien de lo que tiene el otro, es decir, nos sirven de espejo y por eso nos enamoramos.
  • Perpetuar la especie: la defienden algunos biólogos afirmando que buscamos a la pareja adecuada para perpetuar la especie y esto se hace después de una evaluación por "instinto" y buscamos a la mejor persona con la cual nuestros genes se mezclen de la mejor manera. Esta hipótesis tiene en cuenta la realidad animal de la persona humana, que, aunque sea sólo la parte corporal, es real. A pesar de ello, esta teoría excluye a los homosexuales y bisexuales.
  • Creación de gustos: Es cuando la persona durante la infancia empieza a cuadrar sus gustos y, conforme va creciendo, los va haciendo más sólidos. Entonces, encontramos a una persona que se asemeja a lo que se creó desde esa infancia, como por ejemplo: el color del cabello; si un niño ve a alguna niña y le gusta, y esa niña tiene un cabello de color rojo, ese color de cabello va a buscar, siempre y cuando esa persona le haya causado el impacto suficiente para crear un gusto de ese momento y desde ahí va a buscar ese estilo de cosa que le impactó. Ya cuando vamos creciendo, todas esas pequeñas cosas van armando un rompecabezas y llegamos a un punto donde ya sabemos cómo buscamos a una persona. Así pues, nos enamoraremos de la persona que más se asemeje a ese rompecabezas que nosotros tenemos de la persona que buscamos.

Características [editar]

  • Las personas más sensibles ante la persona amada reaccionan con sudoración, pulso acelerado, aumento de la presión arterial, risa floja, taquicardia, alteración de la percepción del tiempo, dolor o ansiedad en el estómago (son las vulgarmente conocidas "mariposas" del estómago).
  • Idealización de la persona.
  • Admiración de la persona.
  • Atribución de cualidades positivas evitando la crítica.
  • Necesidad de estar con la persona.
  • Agradar a la persona amada se convierte en la mayor ilusión.
  • Distorsión en la percepción del tiempo. La ansiedad da la idea de un paso más lento y el júbilo, de un paso más rápido.
  • Cualquier situación o circunstancia le recuerda la persona amada.
  • Ansiedad de estar junto a ésta y al estarlo, no querer separarse.

Bibliografía [editar]

  1. http://www.fluvium.org/textos/jovenes/jov69.htm
  2. http://dulzuragirl.blogcindario.com/2005/01/00043-las-etapas-del-amor-mas-alla-del-enamoramiento.html
  3. http://www.mujertotal.com/editorial/press/mente.asp?articleid=96&zoneid=4
  4. http://www.fortunecity.es/poetas/saber/172/amor_o_enamoramiento_index.htm
  • "Tratado del enamoramiento" de Ramiro Pinto Cañón. Editorial LapizCero", Madrid 2009

Enlaces externos [editar]

PENSAMIENTO MÁGICO2: LA ACTITUD Y EL PENSAMIENTO MÁGICO. En este sentido, puede considerarse la actitud como cierta forma de motivación social -de carácter, por tanto, secundario, frente a la motivación biológica, de tipo primario- que impulsa y orienta la acción hacia determinados objetivos y metas. Eiser[1] define la actitud de la siguiente forma: predisposición aprendida a responder de un modo consistente a un objeto social.

Actitud

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[[Archivo:Es la forma de actuar de cada persona, el comportamiento que emplea un individuo para hacer las cosas.

En este sentido, puede considerarse la actitud como cierta forma de motivación social -de carácter, por tanto, secundario, frente a la motivación biológica, de tipo primario- que impulsa y orienta la acción hacia determinados objetivos y metas. Eiser[1] define la actitud de la siguiente forma: predisposición aprendida a responder de un modo consistente a un objeto social.

En la Psicología Social, las actitudes constituyen valiosos elementos para la predicción de conductas.[2] Para el mismo autor, la actitud se refiere a un sentimiento a favor o en contra de un objeto social, el cual puede ser una persona, un hecho social, o cualquier producto de la actividad humana.

Basándose en diversas definiciones de actitudes, Rodríguez[2] definió la actitud como una organización duradera de creencias y cogniciones en general, dotada de una carga afectiva a favor o en contra de un objeto definido, que predispone a una acción coherente con las cogniciones y afectos relativos a dicho objeto. Las actitudes son consideradas variables intercurrentes, al no ser observables directamente pero sujetas a inferencias observables.

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Otras definiciones [editar]

Además de las definiciones mencionadas, podemos agregar las siguientes:

F. H. Allport: “Una actitud es una disposición mental y neurológica, que se organiza a partir de la experiencia que ejerce una influencia directriz o dinámica sobre las reacciones del individuo respecto de todos los objetos y a todas las situaciones que les corresponden”.

R. H. Fazio & D. R. Roskos-Ewoldsen: “Las actitudes son asociaciones entre objetos actitudinales (prácticamente cualquier aspecto del mundo social) y las evaluaciones de esos objetos”.

C. M. Judd: “Las actitudes son evaluaciones duraderas de diversos aspectos del mundo social, evaluaciones que se almacenan en la memoria”.

Kimball Young: “Se puede definir una actitud como la tendencia o predisposición aprendida, más o menos generalizada y de tono afectivo, a responder de un modo bastante persistente y característico, por lo común positiva o negativamente (a favor o en contra), con referencia a una situación, idea, valor, objeto o clase de objetos materiales, o a una persona o grupo de personas”.

R.Jeffress: "La actitud es nuestra respuesta emocional y mental a las circustancias de la vida".

Componentes de la actitud [editar]

Rodríguez[2] distingue tres componentes de las actitudes:

Componente cognoscitivo: para que exista una actitud, es necesario que exista también una representación cognoscitiva del objeto. Está formada por las percepciones y creencias hacia un objeto, así como por la información que tenemos sobre un objeto. En este caso se habla de modelos actitudinales de expectativa por valor, sobre todo en referencia a los estudios de Fishbein y Ajzen. Los objetos no conocidos o sobre los que no se posee información no pueden generar actitudes. La representación cognoscitiva puede ser vaga o errónea, en el primer caso el afecto relacionado con el objeto tenderá a ser poco intenso; cuando sea errónea no afectará para nada a la intensidad del afecto.

Componente afectivo: es el sentimiento en favor o en contra de un objeto social. Es el componente más característico de las actitudes. Aquí radica la diferencia principal con las creencias y las opiniones - que se caracterizan por su componente cognoscitivo -.

Componente conductual: es la tendencia a reaccionar hacia los objetos de una determinada manera. Es el componente activo de la actitud. Sobre este componente y la relación entre actitud-conducta, y las variables que están interviniendo, girará nuestra investigación.

Para explicar la relación entre actitud y conducta, Fishbein y Ajzen, (1980, citado en Rodríguez[2] ) han desarrollado una teoría general del comportamiento, que integra un grupo de variables que se encuentran relacionadas con la toma de decisiones a nivel conductual, ha sido llamada Teoría de la acción razonada.

La psicología social distingue un estudio de la estructura intra- aptitudinal de la actitud, para identificar la estructura interna, de un estudio de la estructura inter-aptitudinal, para buscar diferencias y similitudes entre mapas donde confluyen más actitudes.

Las funciones de las actitudes [editar]

En los procesos cognitivos, emotivos, conductuales y sociales, son múltiples. La principal función resulta ser la cognoscitiva. Las actitudes están en la base de los procesos cognitivos-emotivos prepuestos al conocimiento y a la orientación en el ambiente. Las actitudes pueden tener funciones instrumentales, expresivas, de adaptación social (como en los estudios de Sherif sobre la actitud en relación al ingroup, el propio grupo de referencia y el outgroup, el grupo externo), ego defensivo (un ejemplo clásico es el estudio sobre la personalidad autoritaria de Adorno en los años 50).

Este concepto resulta central en toda la psicología social porque tiene una aplicación en muchos campos distintos:

  • Frente a objetos o conductas especificas con finalidad predictiva de la conducta, en los estudios de mercado.
  • Grupos o minorías étnicas, mediante el estudio de los prejuicios y de los estereotipos.
  • Fines y objetivos abstractos, donde este tipo de actitud está definido como valor personal.
  • La actitud en relación a si mismo, definida como autoestima.

Actitud y sociología [editar]

El concepto de actitud, como una tendencia a responder de igual manera en iguales circunstancias, no sólo es de interés en Psicología Social sino también en Sociología.

Desde el punto de vista afectivo, es posible encontrar algunas actitudes básicas en el hombre, que servirán para describir su comportamiento social.

Baruch de Spinoza, en su “Ética” describe al amor como la tendencia a compartir penas y alegrías de nuestros semejantes, mientras que al odio lo describe como la tendencia a alegrarnos del sufrimiento ajeno y a entristecernos por su alegría.

Si a éstas actitudes les agregamos el egoísmo, como tendencia a interesarnos sólo por cada uno de nosotros mismos y a la negligencia como tendencia a desinteresarnos por todos, tenemos prácticamente cubierta la totalidad de las actitudes afectivas posibles.

Podemos decir que todo ser humano posee, en distintas proporciones, algo de amor, algo de odio, de egoísmo y de negligencia, preponderando una de ellas en cada caso.

Es posible hablar de una “actitud característica” en cada persona, por lo que habrá tantas actitudes distintas como personas existan en el mundo. Dicha actitud, precisamente, caracteriza a cada ser humano y no es algo fijo o permanente, sino que puede cambiar debido a la educación o bien a la influencia recibida desde el medio social.

Tanto en Psicología Social como en Sociología se buscan variables observables y cuantificables que sirvan de soporte a descripciones que puedan encuadrarse en el marco de la ciencia experimental, de ahí que es posible definir a la actitud característica como el cociente entre respuesta y estímulo: A = R/E

Así, la actitud del amor implica compartir penas y alegrías (que habría de ser la respuesta), mientras que el estímulo serían las penas y alegrías originales que luego habríamos de compartir.

Si asociamos el bien al amor, mientras que al odio, al egoísmo y la negligencia les asociamos el mal, disponemos de una ética elemental que podrá incluirse en una descripción compatible con el método de la ciencia.


Bibliografía [editar]

“Ética demostrada según el orden geométrico” de Baruch de Spinoza – Fondo de Cultura Económica – ISBN 968-16-0497-0

“Psicología Social” de R. Baron y D. Byrne – Editorial Prentice Hall – ISBN 0-205-18944-X

“Psicología Social” Tomo I – Plaza & Janes Editores SA – ISBN 84-01-61264-0

“Psicología de las Actitudes” de K. Young, J.C. Flügel y otros – Editorial Paidós SA

Referencias [editar]

  1. Eiser, J.R. (1989). Psicología Social. Madrid: Pirámide. ISBN.
  2. a b c d Rodríguez, A. (1991). Psicología Social. México: Trillas. ISBN.

Véase también [editar]

Enlaces externos [editar]

 

PENSAMIENTO MÁGICO2: BELLEZA Y PENSAMIENTO MÁGICO. GLAMOUR. El glamour era el resultado del trabajo de un equipo de profesionales altamente cualificados: maquilladores, peluqueros, modistos de alta costura, etc.

 

Glamour

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Para la publicación estadounidense, véase Glamour (revista).

El glamour o glamur es un anglicismo (Ac. 2001) que designa un tipo de belleza muy elegante y sofisticado, que era característico de algunas estrellas femeninas de Hollywood en los años 1930, 1940 y 1950. Es la antítesis del tipo de belleza conocido como "girl next door" (la chica de al lado), popularizado por la revista Playboy.[1]

El glamour era el resultado del trabajo de un equipo de profesionales altamente cualificados: maquilladores, peluqueros, modistos de alta costura, etc.

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Orígenes etimológicos [editar]

La palabra glamour proviene de la palabra "grammar", que utilizaban los irlandeses para designar a personajes dotados en la lengua, como escritores o relatadores. A su paso por Gran Bretaña, la palabra pasó de "grammar" a glamour, así como pasó de designar a las personas con dotes para escribir o recitar a designar a personas que destacan por su belleza o elegancia, personas que fascinan.

Bibliografía [editar]

  • Arturo del Hoyo - Diccionario de palabras y frases extranjeras. 3ª edición. Punto de lectura. Madrid, 2002. ISBN 84-663-0810-5.
  • Dominique Paquet - La historia de la belleza. Grupo Zeta. 1998. ISBN 84-406-8464-9.

Referencias [editar]

Véase también [editar]

Enlaces externos [editar]

PENSAMIENTO MÁGICO2: BELLEZA Y PENSAMIENTO MÁGICO. La belleza es una característica de un ente real, imaginario o ideal cuya percepción constituye una experiencia de placer, revelación de significado, o satisfacción. La belleza es estudiada como parte de la estética, la sociología, la psicología social y la cultura. Como creación cultural, la belleza ha sido muy comercializada. Una «belleza ideal» es una entidad que es admirada o posee características ampliamente atribuidas a la belleza perfecta en una cultura particular.

Belleza

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Para otros usos de este término, véase Belleza (desambiguación).
Rosetón en Notre Dame de Paris. La luz fue considerada como la revelación más hermosa de Dios, como se manifestó en la arquitectura gótica.

La belleza es una característica de un ente real, imaginario o ideal cuya percepción constituye una experiencia de placer, revelación de significado, o satisfacción. La belleza es estudiada como parte de la estética, la sociología, la psicología social y la cultura. Como creación cultural, la belleza ha sido muy comercializada. Una «belleza ideal» es una entidad que es admirada o posee características ampliamente atribuidas a la belleza perfecta en una cultura particular.

La percepción de la «belleza» a menudo implica la interpretación de alguna entidad que está en equilibrio y armonía con la naturaleza, y puede conducir a sentimientos de atracción y bienestar emocional. Debido a que constituye una experiencia subjetiva, a menudo se dice que «la belleza está en el ojo del observador».[1] En su sentido más profundo, la belleza puede engendrarse a partir de una experiencia de reflexión positiva sobre el significado de la propia existencia.

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Historia de la belleza [editar]

El Taj Mahal es un ejemplo de la simetría en la arquitectura.

Podría remontarse a la propia existencia del hombre como una de sus cualidades mentales. La belleza se encuentra en obras de filósofos griegos a partir del período presocrático, como Pitágoras. La escuela pitagórica vio una importante conexión entre las matemáticas y la belleza. En particular, notaron que los objetos que poseen simetría son más llamativos. La arquitectura griega clásica está basada en esta imagen de simetría y proporción. Platón realizó una abstracción del concepto y consideró la belleza una idea, de existencia independiente a la de las cosas bellas. Según la concepción platónica, la belleza en el mundo es visible por todos; no obstante, dicha belleza es tan solo una manifestación de la belleza verdadera, que reside en el alma y a la que solo podremos acceder si nos adentramos en su conocimiento. Consecuentemente, la belleza terrenal es la materialización de la belleza como idea, y toda idea puede convertirse en belleza terrenal por medio de su representación.[2]

La belleza, generalmente, se ha asociado con el bien. De la misma manera, lo contrario de la belleza, que es la fealdad, a menudo se ha relacionado con el mal. A las brujas, por ejemplo, con frecuencia se les atribuyen rasgos físicos desagradables y personalidades repulsivas. Este contraste aparece representado en cuentos como La bella durmiente, de Charles Perrault.[3] En su obra Las afinidades electivas, Goethe declara que la belleza humana actúa con mucha mayor fuerza sobre sentidos interiores que sobre los externos, de modo que lo que él contempla está exento del mal y sienta en armonía con él y con el mundo.[4]

Proporciones ideales del cuerpo humano esquematizadas en el Hombre de Vitruvio, de Leonardo da Vinci.

La simetría es importante porque da la impresión de que la persona creció con salud, sin defectos visibles. En la percepción de la gente bella se dan ciertas concordancias: ojos grandes y tez clara, por ejemplo, son considerados hermosos tanto en hombres como en mujeres de muchas culturas. Algunos investigadores han sugerido que rasgos neonatales son intrínsecamente atractivos. La juventud en general se asocia con la belleza.

Hay pruebas que hacen intuir un rostro hermoso en el desarrollo infantil, y que las normas de atractivo son similares en culturas diferentes. El promedio, la simetría y el dimorfismo sexual para determinar la belleza pueden tener una base evolutiva. Los metaanálisis de la investigación empírica indican que las tres características producen atracción tanto en caras masculinas como en femeninas y a través de diferentes culturas. El atractivo facial puede ser una adaptación para la opción de compañero, posiblemente porque la simetría y la ausencia de defectos señalan aspectos importantes de la calidad física del compañero, como la salud. Es probable que estas preferencias sean simplemente instintos.

Los artistas griegos y romanos también tenían el estándar de belleza masculina en la civilización occidental. El romano ideal fue definido como un jefe alto, musculado, de piernas largas, con un pecho lleno de pelo grueso, una alta y amplia frente -un signo de inteligencia-, grandes ojos, una nariz fuerte y perfil perfecto, boca pequeña, y una mandíbula poderosa. Esta combinación de factores produciría una mirada impresionante de hermosa masculinidad. Con las excepciones notables del peso corporal y los estilos de moda, las normas de belleza han sido bastante constantes en el tiempo y el lugar.

En el chino antiguo se escribe un signo que significa "hermoso", pero hoy se combina con otros dos signos que significan "grande" y "oveja". Posiblemente, la oveja grande era representativa de belleza.

La cultura maya consideraba que tener estrabismo era bello, y para conseguirlo, las madres ponían jarras delante de los niños para que crecieran con este defecto; el concepto de belleza puede variar entre culturas.

Belleza humana [editar]

Una reina de un concurso de belleza.

La caracterización de una persona como "bella", ya sea de forma individual o por consenso de la comunidad, a menudo se basa en una combinación de belleza interior, que incluye los factores psicológicos, tales como personalidad, inteligencia, gracia, simpatía, encanto, integridad, congruencia y elegancia, y belleza exterior (es decir, atractivo físico), que incluye factores físicos, tales como salud corporal, juventud, sensualidad, simetría y medianídad.

Comúnmente se mide la belleza externa con base en la opinión general o el consenso de un grupo de personas. Un ejemplo de ello son los concursos de belleza como el de Miss Universo. La belleza interna, sin embargo, es más difícil de cuantificar, aunque en los concursos de belleza a menudo se afirma tomarla en consideración. Un importante indicador de la belleza física es la "medianía". Cuando las imágenes de rostros humanos se promedian para formar una imagen compuesta, ésta se acerca progresivamente cada vez más a la imagen "ideal" y se percibe como más atractiva. Este fenómeno se notó por primera vez en 1883, cuando Francis Galton, primo de Charles Darwin, construyó imágenes compuestas por superposición de fotografías de vegetarianos y delincuentes en búsqueda de una apariencia característica para cada uno de ellos. Al hacerlo, se percató de que las imágenes compuestas resultantes eran más atractivas en comparación con cualquiera de las fotografías individuales.

La investigación moderna sugiere también que las personas cuyos rasgos faciales son simétricos y poseen la proporción perfecta son más atractivas.

Belleza interior [editar]

La belleza interior es un concepto usado para describir los aspectos positivos de algo que no es físicamente observable.

Aunque la mayoría de especies usan los rasgos físicos y feromonas para atraer a su pareja, algunas personas dicen confiar en la belleza interior de sus elecciones.

Las cualidades como la amabilidad, la sensibilidad, la ternura o la compasión, la creatividad y la inteligencia se han dicho que serían deseables desde la parte emocional, ya que constituyen los valores que hacen a una persona agradable, buena e interesante en su forma de ser.

Fealdad [editar]

Artículo principal: Fealdad

La fealdad es una propiedad de una persona o cosa que no es agradable de mirar y trae como consecuencia, una evaluación muy desfavorable. Ser feo es ser poco estético, repulsivo u ofensivo. Al igual que su opuesto, la belleza, la fealdad implica un juicio subjetivo y esta por lo menos en parte, en el "ojo del observador". Así, la percepción de la fealdad puede ser errónea o miope, como en la cuento del Patito feo de Hans Christian Andersen.

A pesar de que la fealdad es normalmente considerada como una característica visible, también puede ser un atributo interno. Por ejemplo, una persona puede ser atractiva por fuera pero por dentro irreflexiva y cruel. También es posible estar de "mal humor", que es un estado interno de desagrado temporal.

La fealdad es algo que esta en la mente, esta tiene su origen en la baja autoestima que se desarrolla en las personas al ver los estereotipos de hombres y mujeres agradables a nuestro sentido de percepcion, tenemos que aprender a aceptarnos como somos , si lo mira bien a veces las personas que son consideradas feas fisicamente son las que poseen una belleza interior extraordinaria, y las que son consideradas lindas fisicamente carecen de esta, por eso deben aceptarse las diferencias en las personas, porque cada una es la que constituye un ser unico.

Véase también [editar]

Referencias [editar]

  1. Gary Martin (2007). «Beauty is in the eye of the beholder». The Phrase Finder. Consultado el 4 de diciembre de 2007.
  2. El Banquete, de Platón,
  3. La bella durmiente, de Charles Perrault.
  4. Las afinidades electivas, de Johann Wolfgang von Goethe.

Enlaces externos [editar]

Wikcionario

PENSAMIENTO MÁGICO2: FELICIDAD Y PENSAMIENTO MÁGICO. La felicidad es un estado de ánimo caracterizado por dotar a la personalidad de quien la posee de un enfoque del medio positivo y un estado de paz interior. Es definida como una condición interna de satisfacción y alegría.

Felicidad (positivismo)

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Para otros usos de este término, véase Felicidad (desambiguación).
Niño jugando.

La felicidad es un estado de ánimo caracterizado por dotar a la personalidad de quien la posee de un enfoque del medio positivo y un estado de paz interior. Es definida como una condición interna de satisfacción y alegría.

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Generalidades [editar]

Se entiende en este contexto como positivo, la capacidad de abordar una tarea llevándola al término propuesto. El resultado final, complace a la persona que acomete dicha tarea. Como resultado de una actividad neural constante en un entorno con variables ya experimentadas y conocidas, los distintos aspectos de la actividad mental fluyen de forma armónica, siendo los factores internos y externos interactuantes con el sistema límbico. En dicho proceso se pueden experimentar emociones derivadas, que no tienen porque ser placenteras, siendo consecuencia de un aprendizaje ante un medio variable.

La estimulación del ego por parte de este sistema, nos dará un enfoque de los resultados más óptimos, ayudando a la integración de la información adecuada. Ello fomentará respuestas nutridas desde el inconsciente, que nuestro consciente adaptará a los límites del medio. De esta forma se propicia o aplaza ese estado anímico. Si no se logra integrar la información de forma óptima (quizás porque no se ha conseguido lo que se pretende), el resultado será una polarización a la espera de ser integrada en una solución que cancele la carga.

Análisis [editar]

Es un estado subjetivo que sin embargo puede objetivarse para su análisis. Los siguientes son ejemplos de disciplinas con aproximaciones objetivas :

  • La Filosofía estudia su concepto y realidad.
  • Psicología positiva: Intenta determinar los factores endógenos que el individuo puede manejar para alcanzar ese determinado estado de ánimo.
  • La Sociología: Se ocupa de analizar qué factores sociales determinan los objetivos que el sujeto se marca como meta para alcanzar estados de felicidad.
  • La Antropología: Muestra cómo distintas culturas han establecido cánones distintos al respecto.

La felicidad y la filosofía [editar]

La pregunta sobre la felicidad es esencial en el surgimiento de la ética en Grecia. Los filósofos encontraron respuestas muy diferentes, lo cual demuestra que, como decía Aristóteles, todos estamos de acuerdo en que queremos ser felices, pero en cuanto intentamos aclarar cómo podemos serlo empiezan las discrepancias. En la filosofía griega clásica hay tres posturas:

Entre eudemonismo y hedonismo existe un desacuerdo fundamental. Aristóteles considera que ser feliz es ser humano en el más pleno sentido de la palabra. Epicuro, por el contrario, se pregunta qué es lo que mueve a los humanos a obrar, porque la felicidad consistirá en conseguirlo, y esa cosa es el placer.

Interacciones [editar]

El subconsciente alimenta este estado de ánimo .[1] Admitir los límites de la personalidad nos facilitará la capacidad de no derrochar recursos en aquello que es incontrolable. .[2] Tratar de condicionar el entorno a nuestro deseo [3] solo impedirá que consigamos atisbar lo que es el flujo [4] que nos lleva al estado de ánimo feliz.[5] Este estado no se encuentra fuera de nosotros, ni siquiera en nosotros, se encuentra en nuestra naturaleza interior. [3] No depende exclusivamente del entorno, sino que es la aceptación de que existen fuerzas más poderosas que nuestra voluntad, modificando nuestra actitud hacia la vida; siendo el pesimismo una actitud que dificulta la consecución de dicho estado anímico y el optimisto una actitud favorecedora, pero ninguna de las dos son determinantes. [6]

La felicidad es una inversión de recursos, los cuales consumiremos para mantenernos, teniendo que repetir el ciclo tantas veces como sea necesario.

La capacidad de dar soluciones a los diferentes aspectos del vivir cotidiano, hace del individuo más o menos feliz. Esto se pone de relieve cuando entendemos lo que es la frustración, causa principal de la pérdida de la felicidad.


Cabe decir que, tal sensación de autorrealización y plenitud, confiere a las personas felices una mayor serenidad y estabilidad en sus pensamientos, emociones y actos; fruto del equilibrio y la compensación de las cargas emocionales y las racionales. Algunas emociones asociados a la felicidad son la alegría y la euforia.

Las decisiones conscientes [editar]

A pesar que nuestro consciente no puede imbuirnos ese estado de felicidad, sí que puede trabajar para fomentar los factores que contribuirán a que las interacciones internas tiendan a estimular al sistema límbico, para que este pueda llegar a informar a nuestro consciente de ese estado anhelado de felicidad.

La lucha interna [editar]

La Amígdala cerebral y el hipotálamo son regiones que cooperan para la transición de las emociones. El neocórtex racionaliza los recursos de los que disponemos. Son dos áreas incompatibles con miles de años de evolución entre ambos, que usan la conciencia como medio de comunicación para poner solución a las demandas bilaterales. Podría ilustrarse con el ejemplo de dos personas que intentan ponerse de acuerdo para solucionar sus problemas personales en un centro de arbitraje, que representaría la conciencia, el lugar donde las emociones y la racionalidad se hacen compatibles. Por tanto, se hace evidente que, para que nuestro sistema límbico informe ese estado predilecto de felicidad, es indispensable que tengamos una conciencia capaz de acallar a las dos partes en disputa. Si solo acallamos a una, la voz de la otra no nos dejará tranquilos, y en consecuencia nuestro sistema límbico nos informará de una aproximación de lo que es la felicidad: La estimulación por catecolaminas. El resultado es cualquiera de los estados asociados a este neurotransmisor y que va a depender de la interpretación que le de nuestro administrador de recursos (conciencia).

La diferencia entre el flujo y polarización. [editar]

Dentro de los estados de conciencia asociados al flujo de la felicidad, los sistemas internos funcionan como si de una 'orquesta filarmónica' se tratase, en ocasiones la sinfonía requiere de uno 'solo', que es cuando destaca ante nuestro consciente una polarización concreta (o neurotransmisor predominante). Si nuestro consciente se cree que el 'solo' es el objetivo final de su existencia, o desconoce como 'invocar' a los otros 'instrumentos' para que entren a 'tiempo', nuestro organísmo al completo sufrirá las consecuencias entrando en otras polarizaciones resultantes de la carencia de una 'sifonía' completa. Dado que nuestro cerebro normaliza la realidad por instinto de supervivencia, la realidad para su centro administrador de recursos será lo que entiende que le ha dado mejor resultado en un pasado y esto depende de nuestra memoria y lo capaz que sea de desentrañar los detalles. El hecho es que es muy fácil que insistamos en la 'invocación' del 'instrumento' en base al recuerdo sostenido.

La experiencia [editar]

Atravesar momentos agradables como desagradables nos ayudan a comprender y enfocar que es eso del 'estado de flujo'. El que es capaz de tocar Jazz, es capaz de focalizar emociones y sentimientos resultantes de sus experiencias pasadas y transmitirlos con notas musicales. Por eso la memoria a este respecto juega un papel crucial.

La memoria [editar]

Si la memoria nutriese de forma eficaz nuestro centro administrador de recursos, los recuerdos fluirían sin obstáculos ante situaciones paralelas, ayudando a que la 'orquesta al completo entre a tiempo'. La degradación neuronal impide que eso suceda de forma sostenida en el tiempo, por lo que si se desea sostener el flujo asociado a la felicidad hasta nuestra muerte, se necesitaría ayuda, algo o alguien que nos estimulara la motivación para recordarnos en todo momento que 'instrumento toca dentro del concierto que se nos está demandando'.

Desórdenes patológicos [editar]

Bien sea por falta de memoria o por falta de experiencia, el hecho de que la 'orquesta entre a destempo' (suele suceder cuando hemos terminado de pasar un tiempo de duelo y nuestro centro administrador de recursos continua invocando un instrumento, que ya por naturaleza no va a sonar por sí solo) en su 'serenata' solo producirá los efectos asociados a una oposición al sentido y dirección que indica nuestro entorno, 'desafianado' en grado extremo y provocando la desorientación de cada sistema metabólico cerebral, que de sostenerse en el tiempo, alterán:

  • Rítmos biológicos de descanso.
  • Rítmos metabólicos cerebrales.
  • Centro inmunológico.
  • Centro endocrino.

A consecuencia de todo esto, el sistema nervioso se va viendo afectado por el caos formado, comenzando a informar 'realidades' razonables únicamente por el enfermo, a consecuencia de:

  • Ansiedades.
  • Ataques de pánico.
  • Obsesiones compulsivas.
  • Fobias.
  • Manias depresivas.
  • Un largo etc.

Todo ello derivado del desorden cerebral patológico producido por la lesión que ha dejado en el cerebro el despojo de su estado de flujo y la insistencia del centro administrador de recursos en que continue 'sonando' un 'instrumento', sin razón de ser, por falta de información. A este respecto ayudan los psicofármacos aportando lo que por naturaleza un cerebro sano debiera administrar y que por su lesión es incapaz de aportar.

La Pirámide de Maslow [editar]

Artículo principal: Pirámide de Maslow
Pirámide de necesidades de Maslow.
  • Fisiología: Los niveles más básicos de sostenibilidad nos los aporta la naturaleza. No obstante, restringir nuestro centro de atención y conciencia a como lograr mantener nuestro estado homeostático, ocupa recursos metabólicos que impiden al cerebro sentirse seguro y confiado.
  • Seguridad: Esta sensación se produce cuando nuestro cerebro ha logrado registrar la pauta por la cual poder asegurar su fisiología. Se refuerzan los enlaces neuronales y metabólicos adecuados, permitiendo que esas tareas funcionen desde nuestro inconsciente. En ese estado de seguridad, nuestra mente ahora puede centrarse en la búsqueda de cooperación y establecer lazos sociales. En resumen, de subir al nivel de Afiliación.
  • Afiliación: La afiliación es la base de la economía. Con la amistad nace el compromiso, con el compromiso nace el trabajo cooperado y confiado, con el trabajo surje material sobrante, con ese material se puede comerciar. El hecho de que se aprecie nuestro trabajo, produce la sensación de reconocimiento.
  • Reconocimiento: Esta sensación se basa en la seguridad de que los demás te necesitan y formas parte de una cadena en la que sin ti, sería costoso reponer nuestra ausencia. Esto permite marcar la pauta de creatividad al cerebro, la pauta por la cual uno puede aportar beneficio y sentirse digno en la sociedad en la que habita. Ésto debería ser suficiente motivación como para poder sostener la Autorealización.
  • Autorealización: También llamada felicidad, se sostiene por la motivación que produce nuestro trabajo constante y continuado. Gracias a las capacidades de nuestro cerebro de crear, de adaptarse y resolver problemas.

La tecnología [editar]

La ciencia y la tecnología son una ayuda valiosísima que nos permite sostener ese estado de flujo por más tiempo del que la propia naturaleza nos hubiese permitido. Pero no debemos olvidar que, tarde o temprano perderemos irremediablemente el paso y comenzaremos a 'desafinar'.

La personalidad [editar]

Hay quienes piensan que la felicidad depende de uno mismo, de lo 'fuerte' que uno sea, de lo valiente, espabilado, sagaz, capaz... en definitiva, de cualidades que son dependientes de otros factores que nada tienen que ver con el estado de flujo asociado a la felicidad, y que por efecto de ésta, experimentamos las otras. La personalidad es la región de nuestra mente que administra los recursos, marca prioridades y establece objetivos; pero no es capaz de imbuirnos estados anímicos, estos son el resultado de la suma de procesos neuroquímicos en los que nuestra persona poco o nada tiene que ver. Podremos favorecer o dificultar que sucedan, pero no impedirlos.

Pensamientos del estilo que, nada o nadie podrá impedir que sea feliz, es relativamente cierto o falso, dependiendo de lo capaces que seamos de tratar con las polarizaciones que nos motivan. Todo lo que sucede es para nuestro beneficio, no obstante, si lo que sucede se opone a lo que consideramos bueno (y ahí entra nuestra personalidad), es cuando el estado preferente se distorsiona y comenzamos a perder el flujo. No podemos actuar como jueces en una naturaleza que no entiende de justicia moral. El idioma de la naturaleza establece un equilibrio termodinámico. Nuestro cerebro sí entiende de termodinámica, pero nuestra consciencia no siempre está educada para comprender la dinámica de esta naturaleza.

Las cosas son como son, tal como suceden, a pesar de que se opongan a nuestros objetivos. Si estamos pasando hambre y nos dicen que debemos levantar dos toneladas de peso al golpe de tres... podremos hacer dos cosas, resignarnos y acabar muriendo de hambre (polarización 1) o tratar de hacer razonar a quien nos puede ayudar (polarización 2). Si no somos conscientes de ese estado de flujo, y de como conservarlo, acabaremos perdiéndolo y no podremos hacer gran cosa por recuperarlo.

La lucha externa [editar]

Hemos de sobrevivir en un mundo competitivo, el cual premia a los que no cometen errores. Los errores se pagan con la extinción del individuo o de la especie. Si una llama de fuego encendida en una vela, cometiese el más mínimo error a la hora de consumir sus recursos, ella misma se extinguiría, y la posibilidad de encender otras velas desaparecería. La complejidad de un ser vivo es mucho mayor, pues al consumo de energía se le suma la dificultad de ser homeostáticos. Por lo que si no somos capaces de transferir adecuadamente la carga, si no somos capaces de 'quemar de forma efectiva la chispa que nos mantiene vivos', el 'fuego' quemará estructuras vitales y acabaremos consumiéndonos nosotros mismos.

Psicología como ayuda [editar]

Como ciencia, se dedica a recoger hechos sobre la conducta y la experiencia, y a organizarlos sistemáticamente, elaborando teorías para su comprensión. Estas teorías ayudan a conocer y explicar el comportamiento de los seres humanos y en alguna ocasión incluso pueden ayudar a las personas a integrar la información percibida fomentando la tendencia a encontrar o incluso a sostener el estado de flujo asociado a la felicidad.

Paradigma Espiritual [editar]

La espiritualidad es la función proyectada en el tiempo de la personalidad, que le dota de una orientación, un futuro y un sentido, por la cual poder establecer prioridades y administrar los recursos energéticos tanto internos como externos, llegando a la conclusión de que la vida sí tiene sentido. En el caso del hombre puede basarse en una esperanza, o en una necesidad común al resto de la fauna.

Esta orientación fortalece la tendencia a conservar el flujo asociado a la felicidad.

Paradigma Positivista [editar]

Martin Seligman, uno de los fundadores de la psicología positiva, menciona en su libro felicidad auténtica que la felicidad es como un conjunto de:

  • Emociones positivas: Tales como éxtasis y la comodidad.
  • Actividades positivas: Tales como la concentración y el cumplimiento de nuestras tareas.

Este autor, presenta tres categorías de emociones positivas relacionadas con el pasado, presente y futuro.

  • Las emociones positivas referentes al pasado incluyen la satisfacción, la alegría, el orgullo y la serenidad.
  • Las emociones positivas referentes al futuro incluyen optimismo, esperanza y confianza.
  • Las emociones positivas sobre el presente se dividen en dos categorías que sean perceptiblemente diferentes:
  • Los placeres: los corporales y más altos son “placeres del momento” e implican generalmente un cierto estímulo externo.
  • Satisfacciones: Las satisfacciones implica la consecución del objetivo por el cual hemos trabajado, el flujo, la eliminación de la timidez, y el saber administrar las emociones negativas para beneficio del objetivo (defensa). Pero cuando una satisfacción viene a las emociones positivas de un final entonces nos sentiremos protegidos.

Las satisfacciones pueden ser obtenidas o ser aumentadas desarrollando fuerzas y virtudes del carácter. La autenticidad es la derivación de la satisfacción y de las emociones positivas de administrar las fuerzas de las que la personalidad dispone.

La buena vida se nutre de la correcta administración de las fuerzas de que dispone la personalidad para obtener el equilibrio interior, por ejemplo, sintiendo que la labor de uno en el trabajo aporta algo positivo y que gracias a ese esfuerzo el colectivo se beneficia a cierto grado. Si además tenemos actividades creativas, estaremos aportando factores favorables para que la felicidad se convierta en un estado profundo de nuestra manera de vivir. El sentido más profundo de la felicidad es experimentado con la “vida significativa”, alcanzada si uno ejercita sus fuerzas y virtudes de los uniques en un propósito mayor que lo suyo metas inmediatas. Otra pregunta interesante es si la tendencia a la felicidad de la experiencia está basada en dispositional afecta o eso es un resultado de las circunstancias de la vida.

El efecto linterna [editar]

Una linterna, correctamente usada, alumbra sin que su estructura externa se vea gravemente comprometida. En ciertas regiones acumulará calor y, de no usarse con moderación, es posible que la potencia de la bombilla acabe dañando ciertas partes. El uso natural de la linterna provocará su envejecimiento y rotura. Ahora, si usamos de mala manera la linterna, y en lugar de usarla de la forma más efectiva, nos conformamos con colocarla en lo alto de un palo y usarla de antorcha prendiéndola fuego, creeremos que estamos obteniendo el mismo objetivo, pero es evidente que no es así.

Con las personas sucede algo parecido. Disponemos en nuestro cerebro de diferentes redes neuronales, que integran diferentes formas de transacción neuroquímica, que a su vez capacitan diferentes formas de inteligencia en el hombre[7] Podremos tener la sensación de creer que estamos dando soluciones a nuestra vida, pero si no somos capaces de aplicar la inteligencia adecuada al campo de la vida que lo necesita, la sensación de estar vivos no nos acompañará, ya que no obtendremos el resultado esperado y la frustración será lo dominante.

En consecuencia a lo anterior, el uso que nos estaremos dando será como el de la linterna en lo alto del palo, y todo porque nuestra conciencia no es capaz de valorar ciertas facultades inherentes de la mente. Quizás porque las experiencias asociadas a la manifestación de dicha inteligencia fueron desagradables, lo consideramos malo y nuestra conciencia huye de esas sensaciones. Lo cierto es que, tras conseguir superar nuestros propios valores morales asociados a nuestra memoria biográfica, la red neural que conforma el ego, puede solicitarle a la conciencia que se pasee por los diferentes registros de nuestras diversas redes inteligentes tal como si fuera una linterna adecuadamente encendida y enfocando en los objetos, nutriendo de datos que nuestra conciencia considera buenos, y no ya para nosotros mismos, pues hemos superado nuestros propios valores morales, sino para el objetivo a conseguir[8] El ego podrá invocar a la memoria aquello que la conciencia ha ido recopilando como bueno, ensamblando la información e integrando una solución.

Fuentes consultadas [editar]

  • El viaje a la felicidad Las nuevas claves científicas Eduardo Punset. E.D. Destino. Octava Edición: 02/2006 ISBN: 84-233-3777-4. Dep. Legal: B.5.199-2006

Bibliografía de referencia [editar]

  • Finding Flow. The psychology of engagement with every day life. Autor: Csikszentmihaly, Mihaly. Editorial: Basic Books, 1997.
  • The Foreseeability of real anti-aging: Focusing the debate. Autor: deGrey, Aubrey D.N.J. Editorial: Departament of genetics. Cambridge, 2003.
  • Jacob's ladder. The History of the human genome. Autor: Gee, Henry. Fourth Estate, 2004.
  • El fin del envejecimiento. Autor: Kirkwood, Tom. Tusquets Editores, 2000.
  • Nuestra Hora Final. ¿Será el siglo XXI el último de la humanidad?. Autor: Rees, Martin. Editorial Crítica, 2004.
  • Humanidad: Una historia emocional. Autor: Walton, Stuart. Editorial Taurus 2005.
  • La hipótesis de la felicidad La búsqueda de verdades modernas en la sabiduría antigua Jonathan Haidt, Gedisa ISBN 84-9784-152-2.
  • Ph. D Authentic Happiness Martin E. P. Seligman, Free Press 2002, ISBN 0-7432-2298-9
  • Las 8 Claves para Ser Feliz. Autor: Sampietro, Albert. Sólo Vía Web. 2007.
  • La felicidad humana, Julián Marías, Alianza Editorial, 2008, ISBN 978-84-206-7851-1
  • Robert Spaemann (1991). Felicidad y benevolencia. Ediciones Rialp. ISBN 9788432126895.

Notas [editar]

  1. Finding Flow. The psychology of engagement with every day life. Autor: Csikszentmihaly, Mihaly. Editorial: Basic Books, 1997.
  2. El viaje a la felicidad Las nuevas claves científicas Eduardo Punset. E.D. Destino. Octava Edición: 02/2006 ISBN: 84-233-3777-4.
  3. a b El viaje a la felicidad Las nuevas claves científicas Eduardo Punset. E.D. Destino. Octava Edición: 02/2006 ISBN: 84-233-3777-4. Dep. Legal: B.5.199-2006
  4. *Finding Flow. The psychology of engagement with every day life. Autor: Csikszentmihaly, Mihaly. Editorial: Basic Books, 1997.
  5. Martin E.P. Seligman, Ph. D Authentic Happiness, Free Press 2002, ISBN 0-7432-2298-9
  6. *Martin E.P. Seligman, Ph. D Authentic Happiness, Free Press 2002, ISBN 0-7432-2298-9
  7. Investigación y ciencia. Temas 17. Inteligencia viva
  8. Dr. Joe Dispenza, D.C. Doctor de Medicina Quiropráctica en la universidad de la vida. Bioquimico por la universidad Aker en Oslo - Noruega.

Enlaces externos [editar]

PENSAMIENTO MÁGICO2: Pensamiento Mágico

El pensamiento mágico es una forma de pensar y razonar que genera opiniones carentes de fundamentación lógica robusta o estricta.

Muy básicamente, consiste en el hecho de atribuirse un efecto a un hecho irrelacionado, sin existir una relación de causa-efecto entre ellos, al menos no una científicamente comprobable. Esto es, por ejemplo, lo que sucede con la superstición.

[editar] Las mujeres y el pensamiento mágico

Al respecto, propongo que demos una ligera vista a lo que señala la psicóloga, Pilar Sordo, respecto de lo que ella llama el pensamiento mágico de las mujeres.

Si lo sintetizamos, este pensamiento mágico hace una relación de causa-efecto ficticia entre un hecho desconocido para la mujer y una sensación de satisfacción o felicidad. Al analizar muy ligeramente este planteamiento, podemos encontrar inmediatamente la causa de muchas aflicciones femeninas: la carencia del hecho que las hará felices.

No es del caso entrar en la discusión acerca de la internalidad o externalidad del origen de la felicidad, ya que eso queda a cada cual, sin perjuicio de que podemos dejar dicho que, en opinión de muchos psicoanalistas, la felicidad, al ser un estado emocional interno, puede perfectamente lograrse a través de procesos exclusivamente internos relacionados con el crecimiento de la autoestima.

En efecto, como hombres nos hemos podido dar cuenta del problema que nos ha generado más de alguna vez el hecho de que la mujer en cuestión desee fervientemente algo que nisiquiera ella sabe qué es. La consecuencia inevitable de ello es que sea muy difícil, si no imposible, lograr la plena satisfacción de la susodicha. Típica es la discusión originada en que el hombre hace algo que le ha pedido la mujer, la que se queja porque él no lo ha hecho en un tiempo específico, de un modo específico, con la rapidez o lentitud que exige implícitamente la tarea, etc., es decir, un sin fin de detalles no especificados en momento alguno por ella, mas que ha asumido como "evidentes", en casos que no necesariamente lo son.

Si lo analizamos desde esta perspectiva, y como dice Pilar Sordo, mientras más pensamiento mágico tiene una mujer, más infeliz será.

[editar] ¿Algo que podamos hacer?

Creo, sinceramente, que, como hombres, podemos hacer algo al respecto; al menos por las mujeres que nos rodean inmediatamete. De algún modo podemos tener la paciencia, y ojalá con la mayor empatía de que podamos disponer, para ponernos en sus zapatos por un momento y razonar en su linea argumental, para luego comprender cuál sería la forma más eficaz de demostrarles el punto en el que están haciendose más expectativas de las que razonablemente pueden esperarse. Después de ello, es necesario mantener esa conexión empática y brindar el apoyo emocional -pues, recuerden la naturaleza extremadamente emocional de la mujer- que requerirá. ¿Por qué ambas cosas? Simple: no es sano remecer los cimientos del mundo psicológico de una persona -sea hombre o mujer- sin el debido respaldo para evitar que tanto las partes que le hacen daño, como las partes que la pueden ayudar, caigan todas por igual. La idea no es echarle el mundo abajo y ya, pues pasarán dos cosas: primero, le proporcionarán una cantidad considerable de sufrimiento -ya sea como dolor o como ansiedad-; segundo, si se vuelven a ver solas en el tema, volverán a construir su castillo en el aire, una y otra vez, puesto que no habrán recibido un aporte, sino que solamente un remezón.

[editar] Ejemplo

Para ejemplificar, señalaremos una típica situación femenina: la mujer que está con una pareja, cuya relación está notablemente deteriorada.

El planteamiento de la mujer: Estoy cansada de la relación, no sé qué hacer: Respuesta masculina tipo: Entonces, termina la relación. Respuesta de la mujer: Es que lo quiero y yo sé que puede cambiar. Lo que el hombre contrargumenta: Si no ha cambiado luego de todo este tiempo con el problema, no va a cambiar nunca.

He aquí un problema común. Desglosémoslo: Pensamiento real: No ha habido ni hay actualmente una causa para lograr el cambio requerido por la mujer, ergo no habrá cambio. Pensamiento mágico: "Algo" podría suceder que lo haría cambiar.

Si deseamos lograr un cambio en la linea argumental de ella, debemos ingresar en su "teoría del caso", para luego insertar, de un modo eficaz, el pensamiento real en su sistema de creencias. La forma específica no podría plantearse, ya que, com individuos que son, no es posible generalizar algo como eso. Suponiendo que la conversación tiene algo de impacto emocional para ella, es necesario que sientan que el pensamiento real no es algo "malo", sino que algo bueno para ellas. Suele ser muy provechoso hacerlas sentir que no sólo uno mismo está para apoyarlas, sino que todos sys cercanos; en resumidas cuentas, abstraerlas del problema, de forma que adquieran una perspectiva más lejana, que las haga sentir que ese problema no es el fin del mundo ni mucho menos, sino que algo superable por ellas con la ayuda de quienes las rodean.

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