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Danza

DANZA. DANZA DE PERÚ: wara wara QUISPICANCHIS "UNSAAC" Y carnaval cusqueño - CUSCO "UNSAAC"

Danzas del Perú

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Marinera en Trujillo.

Las Danzas del Perú son los bailes cuyo origen o transformación han ocurrido en el territorio peruano con elementos de danzas e instrumentos provenientes principalmente de la fusión de la culturas americanas, africanas e hispánicas.

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La Marinera [editar]

Artículo principal: Marinera

Para su vestuario la mujer usa un camisón llamado anaco que sobresale a manera de blusa sobre la falda ancha pegada a la cintura. También son muy vistosas las famosas "Dormilonas", artísticos pendientes (aretes) trabajados en filigrama, obra de los orfebres del pueblo.. La mujer baila con los pies descalzos. El varón viste un saco, pantalón, camisa, zapatos con un sombrero los dos usan pañuelo bailando alegremente al ritmo de la música, la danza es de la costa. Esta danza es típica de la ciudad de Trujillo. Es una danza de mucha coquetería y trabajo en pareja, donde la mujer se muestra difícil, no queriendo aceptar a la pareja, al finalizar termina aceptando. Consiste en tres partes: el inicio, la parte central y la fuga. Durante el baile el varón trata de robarle un beso y la mujer simula aceptar, pero cuando el hombre le va a dar el beso ella voltea la cara y nada de nada.En la parte de la fuga, se elevan los paños.

El Tondero [editar]

Artículo principal: Tondero

Danza también conocida como marinera del Alto Piura, o de la yunga piurana (Morropón). Es anterior a la zamacueca, y de influencia muy gitana en su compás, canto trágico y repetitivo tundete de guitarra; de influencia africana o negra en su forma corísta (coro) e rítmica (el uso del checo, instrumento hecho en base a calabaza seca) y Andina en su forma chillona o llorona.

A diferencia de la zamacueca y debido a la ubicación de la Provincia de Morropón como una región pre andina, este baile lleva el mestizaje criollo (hispano-africanoide) y el andino. Ciudades como Morropón, Chulucanas, San Juan de Bigote, La Matanza, Salitran fueron pobladas por haciendas arrozeras y jaboneras donde vivieron muchos esclavos negros, migrantes gitanos o Piajenos, y debido a la cercanía a la cordillera, también migrantes Andinos que trajeron el Yaraví desde Arequipa, fundiéndolo con la Cumanana, forma de origen hispano-africana; creando también el famoso término norteño Triste con Fuga de Tondero, que también es muy popular en la yunga de Lambayeque.

El Vals Criollo (Vals Peruano) [editar]

Artículo principal: Vals peruano

Si bien hay diversidad de formas según la zona, el más difundido es el vals criollo, de la zona costera centro y norte. Sus orígenes en el Perú, se establecen a fines del siglo XIX, cuando el vals vienés se fue imponiendo en las ciudades. Se baila por parejas semiabrazadas. En el vals tradicional peruano, se usan guitarras acústicas para el acompañamiento musical, cajón peruano y cucharas.

Ésta es una danza de las más representativas y populares. De origen Afro-peruano, la forma actual de bailarla, tomó esas características en los comienzos del siglo XX Se baila en parejas pero sin contacto entre los bailarines; es movida y pícara, con ciertas connotaciones sexuales. Lleva acompañamiento musical de guitarras y percusión tradicional, con solista y coro. Su origen es popular africano. Fue la danza representativa del negro criollo en la costa peruana. Nació en los conglomerados negros de Lima colonial. Instrumentos musicales para esta danza debieron ser originalmente tambores de cuero, el que luego se reemplazó con el cajón y a la maraca por la quijada de burro, agregándosele guitarra y canto. Los versos del festejo siempre fueron de asunto festivo, de allí su nombre. Es característico las repetidas paradas tras periodos de cuatro u ocho compases y al estribillo coral de la fuga. Es posible que originalmente haya sido danza masculina de solista, improvisando pasos y contorsiones acrobáticas con toda libertad de espíritu y sin regla coreográfica alguna. El festejo, cuya coreografía original se desconoce, fue la danza representativa del negro criollo, descendientes de africanos localizados en la costa peruana, nació en los conglomerados negros criollos de Lima colonial.

El Yaraví o Harawi [editar]

El Yaraví es el son que transmite melancolía, tristeza y dolor. Sus orígenes se remontan a un género poético incaico y al mestizaje hispano de Arequipa, la cuna del canto.

En la costa norte del Perú, el Yaraví arequipeño ha adaptado el africanización en la conocida Cumanana. El Yaravi no se bailaba, era antes sólo un canto. Es una melodía lenta, con pausas, triste y melancólica y sus cantos son lamentos por abandonos amorosos o ausencias de seres queridos.

El Huayno o Huayño [editar]

Artículo principal: Huayno

Este baile es el más difundido y popular en los Andes peruanos, y está presente en toda realización festiva. Sus orígenes se remontan a los tiempos incaicos, aunque se ha modificado por influencias posteriores, y varía según la región. Se baila en parejas pero con poco contacto físico. Su acompañamiento musical varía según la región y el estrato socio-cultural. Esta danza proviene de una región muy conocida como lo es para todos y es una danza mestiza

El Q'ajelo o Karabotas [editar]

Esta danza es una de las más representativas del folclore de Puno nacida en la zona Aymara de este departamento, en esta danza el danzarín representa a un jinete bravío, que domina a su pareja, y le hace requiebros, con el látigo en la mano, y al compás de la música. Es alegre, y los bailarines llevan sombrero de alas anchas, chullo con orejeras, bufanda, poncho de vicuña o alpaca, propio de la región, puñal en la pantorrilla, botas y espuelas roncadoras. Se supone que su origen se remonta a la época de la rebelión de Tupac Amaru, en que los yanaconas y los comuneros, bautizados Karabotas, imitaban a las botas finas de los españoles.

El Carnaval [editar]

El Carnaval se ejecuta en todo el Perú, pero el más famoso es el de Puno, en que se realiza la Fiesta de la Virgen de la Candelaria. Es vistoso, muy alegre y colorido, y con variedad de comparsas. Sus orígenes son europeos y también Africana, llegaron aquí en la época de la Colonia. Actualmente perdura en las zonas rurales, en Cajamarca y la Amazonía peruana. La danza de tijeras se ejecuta por diferentes motivos, cuyo origen se remonta a la época prehispánica, y que comprenden costumbres relacionadas con actividades agrícolas, ganaderas, religiosas, etc. A esta se han agregado otras de origen cristiano (cruces, santos, procesiones, etc.), por lo que hoy podemos decir que la motivación para su ejecución es mixta: por un lado, el recuerdo a los antiguos dioses protectores que no se olvidan; y por otro, la creencia católica en un solo Dios.

La Diablada [editar]

Bailarines de diablada en una festividad en Ácora - Puno, foto de Pierre Verger, 1945

La diablada es una danza que se practica ampliamente en diversas regiones andinas y altiplánicas de América del Sur (Perú, Bolivia y norte de Chile).

Se trata cómo fuerzas del mal desean derrotar a las del bien. En 1608 esta representación fue descrita por el fraile Diego González Holguín.[1] Su origen mestizo se debe a los autos sacramentales católicos y ritos andinos.

Julia Elena Fortun indica que la diablada nace de la síntesis de dos antiguas danzas catalanas El Balls des diables y Els sets pecats capitals que se fusionaron con teogonías andinas como el Tío, Wari, Supay o Supay Wachascan, el señor del interior de las montañas.

La diablada está ligada al culto a la Virgen de la Candelaria. La principal celebración es la Fiesta de la Virgen de la Candelaria, patrona de la ciudad de Puno "Capital Folklórica del Perú y América".

Las principales agrupaciones peruanas ejecutantes de la danza, ordenadas cronológicamente, son:

Existen otras danzas peruanas con participacion del diablo como: "Los Saqras" del Cuzco, "El Son de los Diablos" de Lima, "Los Diablitos de Jayanca" de Lambayeque, "Los Diablicos de Bernal" de Piura, "Los Diablos de Huanchaco".

 

El Huaylash [editar]

Artículo principal: Huaylas

También escrito como Huaylarsh*. Se define como danza de comparsa de parejas, cuyo origen tuvo un carácter ritual mítico religioso. Además su evolución se muestra así:

  • 1.- Ritual, mítico-religioso.
  • 2.- Pastoril.
  • 3.- Agrario.
  • 4.- Intermedio o transición.
  • 5.- Mestizo o citadino (moderno).

Esta danza es la más movida y alegre de la Sierra Central. Tiene movimientos muy vivaces, y mudanzas o zapateo muy peculiar. Se baila en grupos de parejas que se turnan para ejecutar diversos movimientos y pasos, con dinamismo y picardía. Se relaciona con las cosechas y las tareas agrícolas, con lo que festejan la riqueza agrícola, el rendimiento de las cosechas y la producción de la zona. Es acompañada por instrumentos como el saxofón, violín, clarinete o el arpa. Baile popular muy difundido entre las colectividades del Valle del Mantaro; y, en particular santiago león de chongos bajo, Huayucachi y Huancán (situados al sur de Huancayo) son los creadores o haber decidido su preservación nacional. La agricultura y la ganadería son actividades tradicionales importantes para el hombre andino por constituir uno de los principales medios de vida y desarrollo vigentes hasta la actualidad. Estas actividades han dado origen a múltiples danzas, siendo una de ellas el Huaylars de Carnaval.

En la introducción los bailarines realizan una espera que refleja la preparación para la danza, luego el baile en sí donde se realizan diversos desplazamientos coreográficos, líneas, paralelas, cruces, círculos, etc. Finalmente el contrapunto de parejas en donde las parejas expresan enamoramiento, galanteo y acompañado por sus zapateos característicos tanto del varón como de la mujer.

Conjuntos de Huaylarsh más destacados [editar]

  • 1.- Poderoso Papá Palías de Chongos Bajo
  • 2.- Nueva Sociedad San Cristobal De Huayucachi.
  • 3.- Virgen de Lourdes Huancayo.
  • 4.- Union Progreso Chongos Bajo.
  • 5.- Angeles Virgen de Lourdes del CerritLos o de la Libertad..
  • 6.- Asociación Cultural Folkloristas de Huancayo
  • 7.- asociación cultural Picaflor de los Andes (pica pica.... piedras)
  • 8.- Compañia Folklorica "Real Estrellas" - Huancayo (Purita Calidad y lo nuestro...)

nueva juventud tunzo

Danza “Los abuelitos de Quipán” [editar]

La danza tradicional “los abuelitos de Quipán” de origen mágico religioso fue atribuida en la cosmovisión andina donde vivieron los legendarios Markas, en épocas pasadas. Se amestizó en el siglo XVI por el sincretismo hispano en el naciente pueblo de San Pedro y San Pablo de Quipán. Viene bailándose desde su entronización como homenaje festivo a la Virgen del Carmen, los días 14 al 16 de julio de cada año en el pueblo y en los pueblos citadinos de Huacho, Huaraz, Lima (8va a partir de 1948) por los Quipaneños migrantes. Constituye el hecho folklórico: La música subyugante tañida en el arpa (antes con el violín), que va más allá del sonido y el ritmo atractivo. La coreografía del pasacalle y la mudanza del transporte – llano, transporte, flor de habas, terrón de azúcar, especialmente el llano y el sauce, encarnados de alegría, éxitos, equilibrio y armonía espiritual al ser ejecutados con estilo y garbo señorial. El danzarín con terno oscuro lleva la romántica parafernalia sui géneris del chullo ó gorro; la “champa” de cintas policromadas con íconos florales del lugar deslizándose en la espalda a modo de hermosa cabellera, rosones, cintas, espejos, trencillas en criznejas finas, un pañuelo carmín bordado con expresión de amor y bondad, una atractiva máscara de tez clara remedo europeo del conquistador, dos perneras o “garcela” o “morescas” colmadas de trepidante cascabeles que armonizan los solemnes pasos, movimientos del danzante; un bastón que es símbolo de distinción y autoridad, alrededor del cual zapatean con brío perfecto sosteniendo su propia paz y un par de guantes de arraigada estirpe. La enigmática danza representaría a los curacas o markas, o al concejo de notables ancianos del pueblo, o acaso una parodia a las viejas autoridades del coloniaje, o tal vez al hombre de la tercera edad en virtud de su ciclo vital. Esta danza trasuntada en el tiempo fue y es trasmitida de padres a hijos, de generación en generación. Tiene un fructífero recorrido en nuestra patria y en varias ciudades de América, Europa, Asia, entre otras. Por ser una de las más representativas en la Región Canteña, fue declarada Patrimonio Cultural de la provincia de Canta, mediante Resolución de Alcaldía Nº 177-2001-MTC, de fecha 8 de septiembre del 2001. [1]

Notas [editar]

Véase también [editar]

Enlaces externos [editar]

 

DANZA. ARAGÓN (ESPAÑA): SEGUIDILLAS Y JOTAS ARAGONESAS. La jota aragonesa es una manifestación del folclore en Aragón de un género musical, la jota, presente en la mayor parte de la geografía española. El género, tal y como se conoce en la actualidad, se conforma a finales del siglo XVIII o principios del XIX.

Jota aragonesa

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El mítico cantador de jota del siglo XIX Pedro Nadal y Auré, "el Royo del Rabal", en un retrato de 1881 de Carlos Larraz y Micheto.

La jota aragonesa es una manifestación del folclore en Aragón de un género musical, la jota, presente en la mayor parte de la geografía española. El género, tal y como se conoce en la actualidad, se conforma a finales del siglo XVIII o principios del XIX.

La jota aragonesa se expresa a través del baile (bailadores), el canto (cantadores) y la interpretación instrumental, compuesta por una rondalla en la que participan fundamentalmente la guitarra, el laúd y la bandurria.

A pesar de la fama de que goza como género emblemático del folclore aragonés, la jota no es más que una de las manifestaciones de su tradición musical popular. Conviven con ella otras formas (mazurcas, paloteados, villanos, boleros o valses por citar solo algunos ejemplos), aunque la interpretación de la jota en Aragón tiene un carácter peculiar y distintivo que ha hecho que sea conocida en el ámbito internacional, hasta el punto de que compositores de música culta españoles y foráneos se han servido de ella en sus obras. En palabras de uno de sus más concienzudos estudiosos, Miguel Manzano:

En Aragón ha surgido, aproximadamente desde la mitad del siglo XIX, una forma muy especialísima de cantar la jota en estilo adornado y a ritmo muy lento, y con un repertorio y ejecución también muy característicos de acompañamiento de rondalla. Esta especie de jota es la única que puede denominarse con toda propiedad jota aragonesa, porque es creación personal y exclusiva del pueblo aragonés, que además lo ha conservado, fomentado, y desarrollado con un empeño muy especial y continuado.
Miguel Manzano Alonso, La jota como género musical, Madrid, Alpuerta, 1995, págs. 437 y ss.[1]

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Origen [editar]

Los orígenes de la jota deben estar en bailes de tipo religioso, y comúnmente las manifestaciones bailadas de este género preceden a las cantadas o tocadas.

Aunque hay quienes defienden que la etimología del término proviene la palabra árabe «xotah» (saltar rítmicamente), y podría estar relacionado con el verbo sotar que aparece en el siglo XIV en el Libro de buen amor, el nombre de «jota» no se documenta fehacientemente hasta finales del siglo XVII, en un códice titulado Cifras para arpa hallado en Ávila, donde aparece como título en el encabezado del folio 25.

Demetrio Galán Bergua fecha la existencia del género (aunque no asociado al nombre) en 1666, pues el villancico de José Ruiz de Samaniego, maestro de capilla de El Pilar, «De esplendor se doran los aires» , muestra características afines a la jota. La pieza presenta los dieciséis compases típicos de entrada de una jota.

Han sido numerosos los autores que le otorgan una procedencia árabe, pues en Aragón se da con mayor pujanza en los valles que habitaba la población morisca. Sin embargo, los estudios que Tomás Bretón realizó en 1890 con motivo de la escritura de la zarzuela La Dolorosa establecían grandes diferencias con la música islámica, sobre todo por su habitual modo mayor. Para él el origen sería italiano, pues la jota se revela técnicamente similar a la música del Carnaval de Venecia.

A pesar de todo, la mayoría de los estudios actuales muestran que hay muchas jotas en modo menor e incluso existe la llamada «jota mora», y que su compás ternario de 6/8 es habitual en la música popular española, siempre influida por la música andalusí. Martínez Torner, en este sentido, insiste en que la jota está íntimamente emparentada con el fandango. Según Julio Caro Baroja «su área en el estado anterior a su expansión por vías no estrictamente populares es la misma que tiene la agricultura de tipo hortícola», y estas zonas coinciden con las variedades de jota aragonesa (sobre todo en los valles del Ebro, Jalón y Jiloca), valenciana y murciana. Se trata de la geografía de los moriscos, lo que avala una posible influencia de su música en la jota.

Antonio Beltrán Martínez, uno de los más afinados estudiosos de la jota, asegura que su nacimiento tuvo que producirse no antes del siglo XVIII y su difusión por toda la Península dataría del XIX. La jota aragonesa sería el resultado de una estilización de estos ritmos ternarios y bailables, que se ralentizaron y adornaron para lucir en el canto, sobre cuyos grandes intérpretes y variedad de estilos descansa la importancia del género en Aragón. Asume que hay fuertes lazos con la música hispanoárabe, si bien sus orígenes no pueden ser dilucidados en todo su alcance con los datos e investigaciones que se poseen en la actualidad. En la época de los Sitios de Zaragoza la jota emerge con pujanza, y es en este momento cuando se puede hablar de la existencia de la jota aragonesa con toda seguridad. En conclusión, y según el mismo autor, la jota aragonesa surgió a la vez en toda España en el XVIII, al igual que ocurrió con el fandango en el siglo XVII.

En 1828, en la narración de una conmemoración en Zaragoza en honor de Fernando VII, se halla documentada la costumbre de los mozos de rondar a medianoche cantando y tocando jotas (se cita expresamente «la aragonesa») con guitarras, requintos, bandurrias, violas, violines, fagots y flautas a las casas de las jóvenes, lo que está en la tradición de las «rondallas de Zaragoza», de las «jotas de ronda» o «rondaderas» y de los cantos a dúo «a dos y a tres voces».

Definición y características [editar]

El baile precede al canto de la jota, lo que vendría respaldado por el hecho de que no se conozcan letras de jota anteriores al XIX. Cuando encontramos a principios del siglo XIX el género consolidado, se utilizan cuartetas, coplas o «cantas» que se adaptan a una música que consta de un ritornello y siete frases musicales. Por ello los versos de la cuarteta se repiten añadiendo una entrada y una vuelta a la copla, con la siguiente estructura, si partimos por ejemplo de la cuarteta «Si tuvieras olivares / como tienes fantasía / los molinos del aceite / por tu cuenta correrían»:

La bandurria es el instrumento que hace la voz solista en la orquestación o «rondalla» moderna que acompaña el canto y baile de la jota.
  1. entrada (verso 2): «como tienes fantasía»
  2. frase musical (verso 1): «Si tuvieras olivares»
  3. frase musical (verso 2): «como tienes fantasía»
  4. frase musical (verso 3): «los molinos del aceite»
  5. frase musical (verso 4): «por tu cuenta correrían»
  6. vuelta (verso 4): «por tu cuenta correrían»
  7. final y mudanza (verso 1): «si tuvieras olivares»

Esta (2-1-2-3-4-4-1) es la distribución de versos por frases cantadas o tonadas más habitual en la jota moderna. Los antiguos, sin embargo, solían utilizar la distribución de versos 1-1-2-3-4-4-1.

La entrada se canta en el tono dominante de la música, pero la vuelta final y mudanza se coantan como los versos 3 y 4 de la cuarteta. Esta estructura admite leves modificaciones, como repetir los versos de vuelta en quiasmo o paralelismo o comenzar por el verso primero de la copla. Existe también la posibilidad de adaptar coplas de cinco o seis versos, repitiendo uno o dos. La copla aragonesa pudo ser en sus inicios hexafraseada, como la andaluza. Martínez Torner afirma que estos modelos musicales que el tipo son anteriores a la cuarteta castellana. Podrían relacionarse con estructuras zejelescas, que tienen su origen en la poesía árabe andalusí del siglo XI.

La jota es una música de tipo homófono, ejecutada en su melodía dominante por un «cantador» o «cantadora» acompañado por guitarra o rondalla, aunque se dan los cantos a dúo (frecuente en las oliveras del Bajo Aragón y las de desbriznadores de azafrán de La Hoz de la Vieja) que cantan al unísono o alternando coplas (en las llamadas «jotas de picadillo», de carácter mordaz), o por un coro. La escala utilizada es diatónica, y el ritmo, de compás ternario, con melodías de acordes tónicos en modo mayor y dominantes de acordes de séptima (con estructura armónica muy simple que combina tónica y dominante, como por ejemplo La Mayor / Mi Mayor 7ª).

Los adornos, llamadas, compases de espera, ritornellos, introducciones y pausas instrumentales son llamadas normalmente «variaciones» y las partes de acompañamiento a la melodía vocal «canciones», «coplas» o «cantas». Cada tres variaciones de baile, se canta una canción y a veces, con otra melodía, se entona un «estribillo» de versos más cortos que los de la copla (a veces seguidilla) y que no se canta en la «despedida», copla rápida donde se aumenta el tempo musical en cuya letra se alude al final de la jota. Las de estribillo son sobre todo jotas «bailaderas» o «rondaderas» y en ellas se intercalan apelaciones como «madre» o «niña». Para la jota cantada de lucimiento se utilizan casi exclusivamente las coplas o cantas.

En resumen la jota se estructura como un fogoso preludio instrumental, un canto lento y solemne y una salida o «despedida» que puede acelerarse en su ritmo.

La rondalla o conjunto instrumental se compone sobre todo de ejemplares de la familia de la cuerda pulsada, especialmente de guitarra, bandurria y laúd, aunque poco a poco se va recuperando el uso de guitarrico y guitarro, requintos, hierrecillos acompañados por percusión de castañuelas y panderetas. Sin embargo la investigación sobre el folklore atestigua que la jota, como otros géneros del folclore aragonés, se tocaba con todo tipo de instrumentos, como gaitas de boto, chiflo, dulzainas, violines o flautas, en incluso acordeones. Como instrumentos de percusión se utilizaban tambores y cántaros, todo ello en épocas anteriores a la estandarización y utilización interesada que la jota sufrió durante el franquismo.

En la rondalla habitual la guitarra es el instrumento grave y se toca con acordes rasgeados. La bandurria es la voz aguda y se encarga de las melodías instrumentales, mientras que el laúd funciona como instrumento contrapuntístico.

En cuanto al texto de las músicas de jota aragonesa (llamado copla o «canta» entre otras denominaciones), lo habitual es que su estrofa sea una cuarteta asonantada de tradición popular. En algún caso pueden rimar en consonante los versos segundo y cuarto. También se dan formas de cinco y seis versos. En las jotas con estribillo, este se intercala entre las coplas y adopta la forma de seguidilla con versos que alternan el heptasílabo y el pentasílabo y rima también asonante, en incluso se hallan seguidillas de versos hexasílabos y octosílabos, formadas por ocho versos pentasílabos (como sucede en Mainar, o de seis y siete sílabas, en Bujaraloz. Sus letras suelen ser ingeniosas y la lengua utilizada es el castellano, aunque se dan jotas en cheso, ribagorzano y otras variedades de aragonés en el norte.

Las cantas tienen origen folclórico aunque muchos autores han compuesto coplas de invención personal, si bien no dejan de aumentar el acervo de la tradición, una vez que se instalan en los repertorios de los cantadores. Han compuesto letras para jotas escritores ilustres como Mariano de Cavia, Ram de Víu, Joaquín Dicenta o Sixto Celorrio.

Su temática es muy variada y depende del momento para el que se crean: rondas, fiestas, labores del campo... El destinatario interno de las letras de jotas es la mayor parte de las veces la amada y en ellas se expresan elogios, desdenes o elegías a la mujer desaparecida. Otro tema recurrente es la exaltación, plegaria o devoción a la Virgen del Pilar. También lo son la ayuda para la fertilidad del campo aragonés y el deseo de abundancia de una constante en el imaginario común de Aragón: el agua. Habitual es asimismo el sentimiento de vinculación con la tierra y la patria chica. También existen jotas cuyo tema es una sutil denuncia social.

El carácter de la copla de jota debe ser sentencioso y epigramático. El humor optimista e ingenioso, la «sal» es un rasgo que aparece habitualmente, y destaca en las jotas «de picadillo», cuyo tono es de escarnio, en las que están presentes en numerosas ocasiones los juegos de palabras y de concepto. En ocasiones un símil o comparación presta el eje vertebrador a la estructura de la canta.

El baile de la jota [editar]

Existen caracteres que distinguen los bailes de tres grandes zonas: el Bajo Aragón, Huesca y Zaragoza. La del Bajo Aragón (Calanda, Albalate del Arzobispo, Alcañiz) es la más compleja y posiblemente antigua.

El baile de la jota tiene tres partes en conformidad con las coplas que se cantan: inicio, parte media y final.

  • Inicio. Para comenzar se produce la «llamada», que consta de cuatro rasgueos a tutti de toda la rondalla del acorde tónico. Después continúa la parte inicial con variaciones instrumentales (de ocho compases de duración, la mitad de tónica y la otra mitad de dominante). Mientras suenan estos compases de variaciones, donde se adornan los músicos, la pareja se coloca enfrentada y espera, mirándose y sin movimiento alguno, que comience la primera copla, que da inicio al baile. Otras veces es el grupo el que toma posiciones o va saliendo del foro y colocándose en sus posiciones de partida, con hechuras de presentación.
  • Parte media: el baile. Acompañándose con las castañuelas o «palillos», se bailan varios pasos, adecuados a las variaciones y coplas, que suelen ser tres, aunque a veces el número se reduce a dos.
  • Final. El baile se aviva tras la última copla, y termina con cuatro acordes muy marcados.

Los pasos del baile de la jota se caracterizan por el uso de los punteados de punta y talón y los pequeños saltos que, con la evolución del espectáculo, se convirtieron en alardes atléticos. Los brazos, arqueados y habitualmente en alto moviéndose delante del cuerpo abajo y arriba.

Existan modalidades peculiares en Huesca, sobre todo en el Pirineo (Ansó, Hecho), donde adoptan influjos franceses y existen pasos cogidos de la pareja.

La jota cantada [editar]

Estilos [editar]

Existen varios intentos de clasificación, como el que hace Demetrio Galán Bergua en El libro de la jota aragonesa, que es el más aceptado, si bien no existe una definición definitiva de los diferentes grupos de jotas y estilos. Los estilos clásicos reconocidos proceden del Valle del Ebro (incluyendo la capital, Zaragoza), el Bajo Aragón y en general las zonas históricamente habitadas por moriscos, dato que avala un posible origen islámico de la jota, como también lo es su compás ternario.

Entre estos estilos clásicos destacan las «zaragozanas», las «aragonesas» (en sus modalidades de «puras» y «libres», que fueron tonadas interpretadas por «El Royo del Rabal») y las «femateras», de las que la «aragonesa pura» sería un ejemplo, por su cercano parentesco.

Otros estilos son las «fieras», que adoptan cadencias andalusíes. Las «rabaleras» toman su nombre del «rabal» o arrabal. Otro grupo está relacionado con las faenas del campo: las «segadoras», «trilladoras» y «oliveras», estas últimas características del Bajo Aragón. Del sur proceden las «jotas de Teruel».

Otro grupo lo componen las «melismáticas». Muchos otros tipos de jotas se conocen por el nombre de los pueblos donde fueron documentadas o del cantador que las popularizó. También existen composiciones originales de diversos jotistas, sobre todo con la aparición de grupos joteros a mediados del siglo XX, que necesitaban ampliar y variar su repertorio, si bien a veces esto se hizo en detrimento de la autenticidad.

Capítulo aparte merecen las «rondaderas», interpretadas por grupos de jóvenes por las calles cuando salían a rondar o requebrar en grupo a las mozas, las «bailaderas», o aptas para ser interpretadas al baile y las «jotas a dúo» o «de picadillo».

La enseñanza y los premios de jota [editar]

El certamen más importante de jota aragonesa es el Certamen Oficial de Jota del Ayuntamiento de Zaragoza, celebrado desde 1894 cada año durante las fiestas del Pilar, solo interrumpido en 1898 debido a la Guerra de Cuba, por la epidemia de 1918 de gripe española y desde 1936 a 1939 por causa de la Guerra Civil. En 1959 se instituyó un premio extraordinario solo para quienes son poseedores del Primer Premio.

El primer gran estudioso de la jota fue Santiago Lapuente, que fue pionero en la determinación de los estilos de jotas. Pocos años más tarde fue secundado en la investigación de este género por Balbino Orensanz. Otros expertos han profundizado en su estudio, como Miguel Asso, Felipe Colmán, Pascuala Perié, Joaquín Numancia, Camila Gracia, Máximo Maurel y Carmen Cortés.

En 1940 se crea la Escuela Municipal de Jota de Zaragoza, por iniciativa de su ayuntamiento, cuya primera profesora de canto fue hasta 1950, Pascuala Perié. Cuenta con una gran dotación de fondos para su estudio, especialmente una importante colección de registros sonoros. En 1975 se crea la Escuela Municipal de Jota de Huesca y a partir de esta aparecen escuelas en todo Aragón.

Historia [editar]

La jota cantada es quizá la máxima manifestación de este folclore. Al igual que sucedió con el flamenco, la estimación hacia los artistas individuales es uno de los factores que contribuye a que la jota pase de ser una música popular y anónima a un espectáculo del que goza un público cada vez más ilustre. Es en este ámbito donde algunos cantadores y cantadoras alcanzaron gran renombre personal, siendo presentados en los comienzos, ante las máximas personalidades que visitaban Aragón, convirtiéndose así en perfectos embajadores.

Hay consenso en considerar el hito fundacional de la jota aragonesa como espectáculo de calidad el banquete que Santiago Lapuente ofreció en el Hotel Inglés de Madrid la noche del 26 de Marzo de 1894, con el título de «Fiesta a la Jota» y el patrocinio del citado folclorista y otras figuras de la cultura aragonesa de la época, como Eusebio Blasco o Mariano de Cavia.

Los orígenes: El Tío Chindribú (1840-1870) [editar]

Conocemos muy pocos nombres de cantadores de jota de esta época. Se suele proponer como fecha de arranque la del primer cantador de jota de nombre conocido, Vicente Viruete el «tío Chindribú», activo en Épila desde 1840. Tras él han llegado a nuestro conocimiento los nombres de los zaragozanos Vicente Soler y Marianico el del Gas, del oscense «Tío Lereta», fematero (esto es, hortelano), a quien se considera iniciador de la jota fematera que alterna el canto con interrupciones apelativas al público.

El Royo del Rabal y El Tuerto de las Tenerías (1870-1895) [editar]

En esta época destacan dos grandes figuras: la de Pedro Nadal, el Royo del Rabal (1844 - 1905) y Mariano Malandía, el Tuerto de las Tenerías (1847 - 1935). Con ellos se ordenan y asientan los estilos de jotas con la ayuda de la investigación infatigable de Santiago Lapuente. El legendario «Royo del Rabal» fue el cantador más personal, secundado por la figura de su rival Mariano Malandia, «el Tuerto de las Tenerías».

Otros cantadores de esta época fueron los zaragozanos «el Carretero», «el Fematero», «el Jardinero», «el Cuaderno», «el Agudo», «el Grabador», «el tío Lerín», Andresico «el Leñador», Cirilo «el Boniquete»; Blas Mora y «el Capacero», de Albalate del Arzobispo; «el Triguero», de Castelserás; los andorranos Juan Félez y Antonio Aznar; los taustanos Royo Tianos, Marina y Alonso Birigay; M. Melantuche, de Utebo; los bilbilitanos «el Bolero» y Dámaso Salcedo; de Épila es el hijo del «tío Chindribú», Eustaquio Viruete «el Carabinero». Mención aparte merece la saga de los Delmás de Fuentes de Ebro. En esta familia aparece la primera gran figura femenina de la jota aragonesa, Asunción Delmás, junto con el gran Baldomero Delmás, y otros miembros de este linaje como Carolina Delmás y Francisco Delmás.

El Niño Moreno y Juanito Pardo (1895-1910) [editar]

Son tiempos marcados por José Moreno apodado «el Niño Moreno» de Andorra (Teruel) y el zaragozano Juanito Pardo que, muy jóvenes, fueron discípulos y pupilos predilectos de Santiago Lapuente.

Otros jotistas destacados de esta época son los Gracia de Nuez de Ebro (Urbano Gracia, Gerardo Gracia y Juan Gracia), Sansón de Zuera, Bernardo Benito o Ignacio Valenzuela.

En cuanto a las cantadoras, la gran figura de estos años fue María Blasco, emigrada en 1910 al igual que Juanito Pardo a la Argentina, que había ganado el Premio Extraordinario del Certamen Oficial de Jota a los veinte años. Otras voces femeninas del periodo son Vicenta Giménez y Ángeles Giménez, Inocencia Sebastián, Isabel Muñoz y Dolores Mongay.

La edad dorada: Miguel Asso y Cecilio Navarro (1910-1927) [editar]

Es la época presidida por la noble rivalidad entre dos grandísimos intérpretes: Miguel Asso y Cecilio Navarro, ambos oriundos del Barrio de San Pablo de Zaragoza. Es esta la considerada como edad de oro de la jota por la cuantía y calidad de sus intérpretes.

Otros cantadores relevantes de estos años fueron Felipe Colmán, Emilio Arana, Justo Royo «el Cebadero», Joaquín Numancia, Luisico Gracia, Jesús Monreal, Domingo Martínez. En cuanto a las mujeres, aparecen en estos años Pilar Gascón y Pascuala Perié, y tras estas dos enormes cantadoras femeninas otras de gran calidad, si bien no llegaron a su celebridad, como María Asensio «la Burina» Pilar Munárriz, Pilar Albero, Encarnación García o Pilar Lasierra.

La época de José Oto (1927-1955) [editar]

José Oto, considerado como el más grande de los cantadores de jota aragonesa, marca una época, la de la generación del 27, que coincide con la Segunda República y la Guerra Civil. En este periodo domina el número de cantadoras de calidad sobre el de los hombres, entre los que destacan Bienvenido Orga, Celestino Ballarín, Francisco Rodríguez, «Redondo de Épila» y Francisco Caballero durante la Segunda República. En la posguerra aparecen Antonio Royo «el Chato de Casablanca», Lucio Cáncer, Ángel Galé, Matías Maluenda y Tomás Marco.

Pero son las cantadoras las que dominan la escena de la jota en la década de 1930: Camila Gracia, Gregoria Ciprés, Felisa Galé y Jacinta Bartolomé. Tras la guerra destacan Celia Palacián, Pilarín Pascual, Pilar de las Heras, Pilar Abad, Pilar Francés, Angelita Zapata, Irene Izárbez, María Virto, Victoria Morales y Piedad Gil. La muerte de Felisa Galé en 1948, de quien José Oto estaba profundamente enamorado, originó la decadencia del gran cantador, aunque seguiría prodigándose hasta su muerte en 1961.

El Pastor de Andorra y Jesús Gracia (1956- ) [editar]

La segunda mitad del siglo XX está presidida por los cantadores José Iranzo, «el Pastor de Andorra» (n. 1915), y Jesús Gracia (1922-2005), dos intérpretes de características opuestas, la poderosa voz de Jesús Gracia y la jota de estilo del Pastor de Andorra, que popularizó la «jota de la palomica». Numerosos cantadores completan este periodo, en que las escuelas de jota y las agrupaciones de joteros proliferaron.

Cantadores y cantadoras [editar]

Alguna de las voces más representativas del canto de la jota aragonesa por orden cronológico, desde el legendario «Tío Chindribú» son:

Notas [editar]

  1. apud Alberto Turón, «La jota cantada», en <www.arafolk.netArafolk>, 1998-2007. [Consulta: 16 de septiembre de 2007]

Bibliografía [editar]

  • BARREIRO BORDONABA, Javier, La jota aragonesa, Zaragoza, Caja de Ahorros de la Inmaculada de Aragón, 2000. ISBN 978-84-95306-60-9
  • GALÁN BERGUA, Demetrio, El libro de la jota aragonesa, Zaragoza, Demetrio Galán Bergua, 1966. OCLC 64081664
  • GARCÍA MERCADAL, José, La jota aragonesa, Madrid, Taurus, 1963. ISBN 978-84-306-4020-1
  • MANZANO ALONSO, Miguel, La jota como género musical, Madrid, Alpuerto, 1995. ISBN 978-84-381-0249-7
  • SOLSONA, Fernando, La jota cantada, Ayuntamiento de Zaragoza, 1978. ISBN 978-84-500-2763-1
  • ZAPATER, Alfonso, Historia de la Jota aragonesa, Zaragoza, Aguaviva, 1988. ISBN 978-84-7659-012-6

Véase también [editar]

Enlaces externos [editar]

DANZA: DANZA GALLEGA. MUÑEIRA. Galicia tuvo desde hace siglos notables coros y cuerpos de baile que recogían las melodías populares y las danzas campesinas, marineras, etc. Estas danzas se ejecutaban en las fiestas de las distintas comarcas gallegas.

    Galicia tuvo desde hace siglos notables coros y cuerpos de baile que recogían las melodías populares y las danzas campesinas, marineras, etc. Estas danzas se ejecutaban en las fiestas de las distintas comarcas gallegas.
 

Existen diversas danzas que se suelen considerar gallegas como son la jota, la pandeirada, el fandango, el maneo, etc., pero sin duda el baile típico de Galicia entera es la muñeira. En las distintas comarcas adopta variantes, a veces muy profundas que la hacen de difícil ejecución. Suele constar de dos o tres partes: una para efectuar los puntos; otra las vueltas, que constan siempre de 16 compases. La muiñeira es siempre un alarde de ritmo, rapidez y vistosidad. Suele representarse en las romerías gallegas y fiestas, donde suele haber un ambiente tradicional y se recoge el costumbrismo popular.

    La música suele estar representada por un cuerpo de gaitas que consta de: la gaita gallega, el bombo, el tamboril, lo más típico como instrumento es la pandereta.

    Una de las muiñeiras más características de Galicia es el espantallo. Es una danza campesina, con música popular, el traje que se utiliza es típico de la comarca de Noya y pertenece al siglo XVIII. Se trata de una danza inspirada en un espantapájaros (que se coloca en las tierras para que los pájaros no destrocen las siembras realizadas por los campesinos). En medio del baile el espantallo cobra vida para bailar con las mozas. Es en realidad este baile un culto al sol, al agua por las buenas cosechas y el homenaje al espantapájaros que las protege. El traje del espantallo va cubierto de paja.
 

FOLKLORE DE GALICIA

MÚSICA

    Galicia tiene un rico patrimonio folklórico de canciones y danzas populares, siendo la muiñeira la más representativa. La muiñeira es uno de los ritmos más conocidos y utilizado en Galicia. Se ha hecho tan popular que ha sufrido múltiples variantes. Si bien todas tienen la misma estructura musical, su ritmo es más rápido y alegre.

    El nombre de muiñeira se piensa que procede de los bailes que los campesinos hacían en los molinos mientras esperaban para recoger la harina.

    Hay otras danzas y cantos populares que destacan: muiñeira, pandeirada, jota gallega, alborada, alalás, etc.

    La pandeirada guarda una gran similitud con la muiñeira, incluso algunos creen que es la antecesora de ésta. Si bien suelen ejecutarse cantadas con acompañamiento del pandeiro, éste y la melodía llevan distinto acento: el pandeiro, ternario, y la melodía, binario.

    La jota gallega está escrita en compás ternario y se utilizaba mucho en festejos populares para bailar, cantar y tocar.

    La alborada son dulces melodías. Se cree que proceden de los primitivos cantos del amanecer. Hoy es básicamente instrumental. Su métrica es binaria.

    Los alalás están considerados como los cantos más simples y primitivos de Galicia. Su procedencia podría ser celta, su tempo es lento, escrito en compás binario, ternario y cuaternario.

    Dentro de las modalidades de nuestra música popular juega un papel importante el aturuxo. El aturuxo es un grito agudo, extraño. Se echa por lo regular, al final de las canciones y de modo especial cuando empiezan las romerías y diversiones.

 

BAILE

    Galicia tuvo desde hace siglos notables coros y cuerpos de baile que recogían las melodías populares y las danzas campesinas, marineras, etc. Estas danzas se ejecutaban en las fiestas de las distintas comarcas gallegas. Existen diversas danzas que se suelen considerar gallegas como son la jota, la pandeirada, el fandango, el maneo, etc., pero sin duda el baile típico de Galicia entera es la muñeira. En las distintas comarcas adopta variantes, a veces muy profundas que la hacen de difícil ejecución. Suele constar de dos o tres partes: una para efectuar los puntos; otra las vueltas, que constan siempre de 16 compases. La muiñeira es siempre un alarde de ritmo, rapidez y vistosidad. Suele representarse en las romerías gallegas y fiestas, donde suele haber un ambiente tradicional y se recoge el costumbrismo popular.

    La música suele estar representada por un cuerpo de gaitas que consta de: la gaita gallega, el bombo, el tamboril, lo más típico como instrumento es la pandereta.

    Una de las muiñeiras más características de Galicia es el espantallo. Es una danza campesina, con música popular, el traje que se utiliza es típico de la comarca de Noya y pertenece al siglo XVIII. Se trata de una danza inspirada en un espantapájaros (que se coloca en las tierras para que los pájaros no destrocen las siembras realizadas por los campesinos). En medio del baile el espantallo cobra vida para bailar con las mozas. Es en realidad este baile un culto al sol, al agua por las buenas cosechas y el homenaje al espantapájaros que las protege. El traje del espantallo va cubierto de paja

Obtenido de http://www.danzatradicional.com/v_portal/informacion/informacionver.asp?cod=44&te=33&idage=46&vap=0

 

 

DANZA

 

La Danza

"La música y el baile son dos artes que
se complementan y forman la belleza y
la fuerza que son la
base de la felicidad humana".

Sócrates.

Concepto de Danza

Introducirse en el mundo de la danza dará paso a descubrir otras posibilidades de nuestro cuerpo, el significado del movimiento expresivo como parte de la Expresión Corporal, aprendiendo a comunicarse a través de él, así como la relación que tiene con la cultura de donde provenga, lo cuál le dota de un significado específico y una razón de ser. Para inmiscuirse en ella hay que aprender a vivirla, conocerla y apreciarla, sin encasillarla en lo meramente escénico y así lograr conocerla y comprenderla mejor.

“La danza, es una serie de movimientos cadenciosos del cuerpo al son de la voz o instrumentos musicales

Se puede decir que la danza de manera general es la belleza del movimiento, observable en cualquier parte, ya sea llevando el ritmo de la misma naturaleza o de instrumentos musicales, para lo cuál el interior de los individuos responde a los diversos ritmos, empleando de manera organizada el movimiento de músculos a partir de las decisiones mentales.

“La danza es una serie de movimientos intencionales ejecutados con el fin de ajustarlos a un ritmo cuando se realiza acompañado de la música, o en una forma determinada cuando con la ausencia de música se busca resaltar secuencias corporales o ritmos visuales…”

A lo largo de la historia, la danza ha estado inmersa en todas las culturas del mundo, siendo uno de los artes más practicado y estudiado por hombres y mujeres, a consecuencia de este interés, la danza se vuelve un concepto paralelo al desarrollo y evolución de la humanidad.

La Danza es una expresión natural y espontánea en el ser humano, dado que el ritmo es un concepto que acompaña al organismo desde su nacimiento, un ejemplo esta en el ritmo cardiaco y el ritmo respiratorio a partir de los cuales se guía la vida físicamente activa, el movimiento es otro factor que la impulsa a ser una manifestación característica del sujeto, las personas se mueven por la danza, o la danza mueve a las personas, también es una vía a utilizar como forma de comunicación y expresión, desde ideas simples hasta aquellos sentimientos que son difíciles de comunicar con el lenguaje oral. La necesidad de expresarse da paso a la danza, a partir de los movimientos cotidianos, como saltar, girar, correr, agacharse, arrastrarse, etc., se puede decir que a partir de estos movimientos se organiza el cuerpo y el mismo movimiento para dar paso a la danza como medio de expresión.

Historia de la Danza

La danza es la expresión del arte permite descubrir distintas maneras de vivir en la sociedad, evoluciona con la sociedad, y por ello desde siempre los seres humanos han sentido cierta necesidad por el movimiento comunicativo, se han servido de distintas formas para expresarlo y entre ellas esta la danza donde el principal medio de expresión es el cuerpo y por ello forma parte de la evolutiva humanidad.
El desarrollo histórico de la danza juega un papel decisivo en la mezcla de lo sexual, guerrero y religioso como fondo de manifestaciones externas expresadas en el ritmo, la mímica y la coreografía. La danza es productora de lo mágico, del placer psicofísico, de la exaltación orgiástica, de la comunicación con la vida extraterrena. Con la llegada de las civilizaciones más avanzadas y cultas como la egipcia y griega, la danza se convierte en acto religioso, dando culto a una actividad divina. Los griegos incluían la danza en sus programas educativos. Durante la Edad Media, en occidente, el control de la educación estaba en manos de la Iglesia lo que ocasionó un abandono de las danzas ya que solo estaba permitido bailar en contadas ocasiones: procesiones, coros de las iglesias, patios de las iglesias y puertas de los cementerios.

Con el Renacimiento la danza vuelve a retomarse y se convierte en el centro de la vida cortesana. Se desprecian las danzas clásicas griegas y se bailan la Pavana, Gallarda, Volta y Gavota, fundamentalmente. Al llegar el Barroco la danza adquiere una estructura semejante a la de una obra dramática, estando presente el disfraz, la máscara, la acción, el canto, la danza y el gran ballet o apoteosis final. Excluían de la función a los plebeyos y era la diversión de moda y centro de reunión de las artes de la época. El ballet se adapta a las exigencias de los cortesanos y se hace refinado. Los maestros de baile de la época lo eran también de equitación y esgrima por lo que surge el Ballet Ecuestre. Entre las danzas más famosas de esta época destacamos la Zarabanda, El Minué, Chacona, Pasacalles.

A partir del siglo XVIII las danzas se modifican considerablemente ya que se introduce el salto, se quita el tacón a los zapatos y se acortan las faldas. Una de las pioneras fue María Camargo pero el gran reformador fue Georges Noverre, la danza es el medio de expresar una idea dramática". Fue el creador del Ballet de Acción, en donde se expresaba el tema a través de la danza y la mímica, sin necesidad de explicación hablada o cantada. Durante este período de transformación artística, Noverre lleva a cabo la revolución del Ballet en Francia y Alemania, Hilferding en Austria y Rusia. El romanticismo está marcado por María Taglioni, bailarina con una técnica impecable que se desliza de forma etérea sobre las puntas de los pies. Defensora de movimientos amplios, equilibrios prolongados, evita los adornos, doble cabriola y trayectorias quebradas.

La danza es una forma de comunicación entre los seres humanos que, como todo lo que rodea a la humanidad, cambia y evoluciona con el paso del tiempo, por otra parte como una manifestación expresiva busca responder a las diferentes formas de pensar dependiendo de la cultura. Siempre ha estado presente, no existen pueblos sin danza o algún bailes típico del lugar, esto se debe a que todos siempre tienen necesidad de movimiento, en el cuál se incluye a la danza, lo cuál llena muchos aspectos de la vida de un individuo, tales como beneficios físicos, cognitivos, sociales y expresivos. En distintas épocas de la historia se ha danzado por placer con un fin ceremonial, de festejo, de cuestiones mágicas, etc., por lo que se data que siempre se ha danzado, dividiéndose la historia con etapas y regiones distintas para su práctica. Como se observa en la evolución de un ser humano, la danza también evoluciona y cambia según el contacto con distintas ideologías, lo cuál no le quita su folclore original, se vive para evolucionar, y la danza es parte de esta evolución.

Enfoques de la Danza

Las distintas formas de abordar la danza es de suma importancia, puesto que una danza con carácter académico no podrá enfocarse de la misma forma que una danza con carácter escénico, la finalidad de la danza es multidisciplinar, por lo que su uso dependerá de una u otra forma según el enfoque que se le de.
Entonces la danza obedece a distintas ideas, conceptos y prácticas que conforman sus diversas manifestaciones, por lo cuál es necesario abordarla de acuerdo a una clasificación en función de los objetivos o finalidades que persigue, para lo cual se pueden diferenciar de la siguiente manera:

1. Académica, normalmente llamada danza clásica o ballet, basada en el seguimiento riguroso de una determinada configuración de movimientos técnicos y evoluciones coreográficas a través de una repetición monomorfa y de perfeccionamiento en la postura y en los gestos precisos.
2. Escénica, que se orienta a la consecución de la "obra artística" apta para el espectáculo.
3. Mística, fundamentada en conceptos mágicos y/o religiosos, tanto de la esfera individual como social de los bailarines.
4. Creativa-Educativa, que pretende fomentar la expresión e interpretación libre tanto de los movimientos corporales como de su composición coreográfica.
5. Terapéutica, que pretende incidir sobre diversos problemas de la persona a partir de conceptos psicoanalíticos incluso metafísicos, interpretándolos mediante la gestualidad.
6. Recreativa, orientada a favorecer las necesidades de distracción y de recreación de los individuos.

La danza se encuentra en estrecha relación con las acciones motoras del ser humano; siendo esta última una de sus manifestaciones culturales más practicadas, tanto la danza como la misma acción motora utilizan la motricidad humana como campo de acción en el desenvolvimiento de la Expresión Corporal del sujeto. De igual forma tienen en cuenta el espacio, el tiempo, el ritmo, el gesto, etc. Muchos movimientos son posibles en ambos casos, como lo pueden ser, los desplazamientos, giros, saltos, arrastres, golpes, etc., tienen gran similitud en el campo motriz y expresivo, así como los objetivos cognitivos, físicos y sociales en el desarrollo humano son influidos desde la danza tanto como la misma acción motriz. Entonces la danza y las acciones motrices son similares en su campo de acción, es decir, el movimiento corporal.

Tendencias de la Danza

1. Folclórica, “Se configura a partir del patrimonio cultural de una sociedad o grupo social con unas características propias. Se trata de un patrimonio que se ha ido elaborando a lo largo de los tiempos durante los cuales una determinada sociedad ha ido estableciendo sus gustos, ideas, creencias y lenguajes con los que expresar todo ello; la Danza ha sido, de manera muy generalizada, el lenguaje más utilizado por cada sociedad o grupo social para manifestar dichos gustos y creencias. Suelen tener un origen tan remoto en el tiempo que, para la mayoría de Danzas de este tipo, se hace difícil saber, o determinar con total certeza y detalles, cuándo nació, a raíz de qué sucesos o situaciones históricas y su forma Danzada inicial. De hecho, la mayoría de Danzas folclóricas suelen tener sus antecedentes en las Danzas primitivas, que por los vestigios arqueológicos que encontramos, sabemos que ya tenían una función de expresión y de comunicación en el seno de cada sociedad primitiva. Recordemos una vez más que los temas alrededor de los que solían girar las Danzas primitivas eran los fenómenos naturales que les incidían de manera directa: la lluvia, el sol, la fertilidad de la tierra...que dichas sociedades interpretaban como fenómenos ocultos o mágicos. Solían ser Danzas en las que intervenían muchas personas, buscando unas formaciones en el espacio - generalmente en composición circular. Y un seguimiento común del ritmo, de manera que se creaba una especie de "cuerpo de baile" conjunto que suponía sumar fuerzas para ofrecer o combatir esos efectos de la naturaleza.”
La práctica de la Danza aparece en todos los pueblos del mundo y en distintas épocas de la historia, desde un origen ligado a la vida religiosa hasta la representación escénica, en sí la Danza representó una serie de símbolos que representaban a diversos aspectos de la vida cotidiana, por ello es una ventana al conocimiento de una cultura, estas ilustran los conocimientos que se poseían en épocas anteriores, representando así las diversas manifestaciones culturales de la humanidad.
Sobre esta base, las Danzas folclóricas suelen también conformar una coreografía que requiere a bastantes personas, bajo el seguimiento común y pautado del ritmo y conformando unas composiciones y figuras en el espacio concretas que en muchos casos también suelen ser circulares.
“Son Danzas que van más allá de los motivos de las Danzas primitivas, ya que, aunque a veces no se precisa claramente su origen, si se sabe el porqué de su nacimiento, normalmente relacionado con un hecho social, histórico o cultural; por ejemplo: un conflicto bélico, un cambio en las normas sociales o políticas, una epidemia, un descubrimiento o avance en el sistema productivo de la sociedad, etc., por estos motivos, en muchas de las Danzas folclóricas podemos identificar roles y funciones diferenciados: nobles y villanos, caballeros, damas, personajes armados, ciertos animales...y, a su vez, vestimentas y símbolos concretos y vistosos: palos, lanzas, cestos, etc. También, en algunos casos, este tipo de Danza es la que suele estar más próxima a otro tipo de lenguajes y artes de expresión y comunicación como la pantomima, la poesía, el canto, etc.”
Actualmente estamos en una época que ve un renacimiento de este tipo de Danzas, surge la necesidad de identificación social, dado que la sociedad globalizada representa una oportunidad para verse empapado de otras culturas y toda actividad que conllevan, entre estas encontramos a la Danza. Tal resurgimiento motiva a las distintas disciplinas en las que se puede aplicar la actividad dancística rescaten tantas Danzas como sea posible, siempre respetando la idea y folclore original sin que esto evite la flexibilidad a cambiar para innovar.

2. Étnica, “tienen en común con las Danzas que hemos nombrado anteriormente el hecho de poseer un bagaje, un patrimonio de muchos años de existencia. Así como las Danzas folclóricas son representativas de sociedades o grupos sociales de pequeña y de mediana extensión, siempre referidas a zonas geográficas concretas dentro de unas demarcaciones culturales y políticas (países, naciones, estados, provincias, comarcas, autonomías...), las Danzas étnicas son la expresión propia de grandes áreas geográficas naturales del planeta, sin determinación política, que coinciden con rasgos raciales característicos de las personas que, desde sus orígenes, han poblado esas zonas; así hablamos a grandes líneas de Danzas africanas, de Danzas orientales, Danzas hindúes, etc. Como se puede comprobar, las Danzas étnicas se pueden entender a medio camino entre las Danzas primitivas y las Danzas de tipo folclórico; es decir que las Danzas primitivas son los ancestros, las primeras manifestaciones de Danza que poseemos como seres humanos y que ya no conocemos, sólo mediante vestigios arqueológicos (pinturas, estatuillas...).”
Las Danzas étnicas son características de grandes áreas geográficas del planeta en las que se encuentran coincidencias con rasgos genéticos que diferencian los seres humanos, estas Danzas conservan ciertas características consideradas propias, y por ejemplo en las Danzas folclóricas se refieren a grupos sociales concretos, determinadas por la diversidad de aspectos culturales, lingüísticos, políticos, artísticos, etc. Actualmente, como se mencionaba con anterioridad y debido al inmenso avance en los medios de comunicación y la globalización, conocemos en mayor medida la existencia de las personas que pueblan cada área del planeta tierra. En referencia a la Danza Africana Occidental hay que agregar que junto con el conocimiento de los conflictos que generan las migraciones de grupos humanos y la movilidad muy generalizada de personas entre dichas áreas, así como las distintas colonias de países europeos que se encuentran en el continente africano, hace que se genere un interés transcultural que favorece el conocimiento de las Danzas africanas así como todo su arte.

3. Jazz, “A principios y mediados del siglo XX, empieza a tomar forma un tipo de Danza paralelo al fenómeno musical denominado jazz que surge de la adaptación de los estilos étnicos en que la improvisación, tal como la hemos descrito con anterioridad, toma relevancia.

La importancia de la improvisación combinada a unos mínimos de composición predeterminada, dotó de gran vulnerabilidad a la Danza-jazz, en el sentido de permitir todo tipo de influencias y modificaciones. De esta manera se van incorporando influencias como:”
• La propia de los diversos grupos de indios americanos.
• Las tendencias de Danza de las culturas orientales.
• Las Danzas con componente española.
• Las Danzas soul americanas.
La profesionalización de personajes concretos en cada una de estas nuevas maneras de manifestación de la Danza-jazz, provocó un auge en su divulgación a raíz de diversos espectáculos como los de “cabaret” y “music hall”. Este tipo de espectáculos nos han aportado un trabajo artístico muy elaborado y estilizado, orientados al gran público, de esta fusión entre ritmos europeos, ritmos latino-americanos y los de origen africano. De esta manera la Danza-jazz pasa de tener un origen folclórico con una mezcla de Danzas sociales occidentales y étnicas de otras civilizaciones a un sentido eminentemente escénico.

4. Moderna, “directamente derivada de la Danza-jazz, va tomando forma, a lo largo del siglo XX, la llamada Danza moderna que pretende aportar un mayor trabajo técnico corporal y coreográfico. A raíz de diversos bailarines y coreógrafos se abren diversos estilos de desarrollo de la Danza moderna que, en general, gira alrededor de las siguientes características:
• Se procura obtener máxima precisión del movimiento y del gesto corporal a través de la práctica de una disciplina técnica directamente heredada de la Danza clásica, es decir que se utilizan los movimientos técnicos específicos de la Danza clásica o ballet como son: pliés, relevés, battements, rond-de-jambes, passés...
• A pesar de ello, también se experimenta con posibilidades del gesto y la postura del cuerpo, totalmente opuestas a lo que dicta la Danza clásica, así:
• También se persigue un trabajo aislado de los diversos segmentos del cuerpo, un poco robotizados y buscando movimientos angulosos y bien diferenciados de las articulaciones y segmentos (brazos, manos, piernas, caderas, tronco, cabeza...).”
5. Clásica, “académica o "ballet", aunque sus orígenes se dieron en Italia, a raíz de las Danzas formales de la Corte o la manera elegante de caminar de los cortesanos, el establecimiento cumbre del ballet se realizó en Francia. En la ópera de París se estableció una escuela oficial y se desarrolló un programa de ejercitación corporal y coreográfica muy elaborado que se universalizó y se sigue manteniendo en vigencia. Toda la nomenclatura, los nombres de cada paso de Danza, es en francés y, por tanto se comprende por igual en toda academia o escuela de cualquier país. A partir de que se pasa de bailar en las salas de la Corte a pretender desarrollar espectáculos en escenarios, se empieza a generar la disciplina de la Danza académica o clásica y la técnica corporal empieza a evolucionar buscando mayor ligereza a través de giros y saltos que buscan la verticalidad y los movimientos aéreos; también hay una necesidad de obtener una variedad creciente y compleja de gestos...todo ello implicó elaborar un programa de técnica y ejercitación del cuerpo que la academia oficial de París se empezó a poner en marcha durante el reinado de Luís XIV en el siglo XVII.”

6. Contemporánea, “es una de las maneras de comunicación artística de la Danza de mayor actualidad que, por diversificadas que sean la técnicas y orientaciones coreográficas, gira alrededor de la esencia misma de la Danza: expresión e interpretación tanto de sensaciones como de sentimientos y emociones que se pueden dar en cualquier encuadre argumental o contextual. En la Danza contemporánea hay total libertad de interpretación, de formas gestuales, técnicas, coreografías y escenografías. Se puede partir de cualquier idea o inspirarse en todo tipo de fenómenos, realidades, fantasías, etc., por ejemplo, pueden servir como motor para crear un espectáculo de Danza contemporánea aspectos como: mitos o creencias(dioses, fantasías, fábulas...); hechos históricos (cambios socio-económicos, guerras...); elementos de la naturaleza (su esencia, destrucción...); hechos cotidianos (urbanos, del trabajo...); realidades sociales (discriminación, conflictos, soledad...); autores, creadores...(a través de su poesía, prosa, música, pintura...); personajes de diversa índole y un etcétera inacabable de posibilidades. En la concepción de un espectáculo de Danza contemporánea, es importante la aportación personal creadora y de estilo de Danza de cada bailarín y bailarina que interviene ya que, junto a ir componiendo la coreografía y la escenografía, es de vital importancia experimentar con la improvisación gestual y corporal para ir encontrando el mensaje que se quiere hacer llegar al público.”
Las numerosas tendencias de la Danza como arte, denota diferentes formas de interpretarse o expresarse, en este caso habría que colocarse desde distintos puntos de vista para poder analizar su riqueza cultural en toda su gama de posibilidades. Para la Expresión Corporal el manejo de la Danza como manifestación expresiva permite abordar todo tipo de tendencias, sin importar época o estilo, siempre y cuando se respete la finalidad expresiva y de movimiento. Se puede utilizar la Danza con un sentido de expansión de posibilidades motrices, es decir, el desarrollo de la condición física, siempre y cuando se tomen en cuenta aspectos esenciales para la práctica dancística, como la organización armoniosa del cuerpo, donde encontramos conceptos como el tono, la postura, el gesto, etc.

 

Fuentes:
- Castañer Balcells, Marta, (2000). Expresión corporal y danza, Ed. INDE, Zaragoza, España.
- Zamora, Eduardo (2006) “Danza, Percusión Africana y Expresión corporal en sujetos de 17 y 18 años” Trabajo de Tesis

DANZA: DANZA AFRICANA.

 

DANZA: DANZA COREANA. La danza tradicional coreana originó en antiguo rituales shamanistic millares hace de años. Para el momento en que de los reinos coreanos más últimos, Goryeo y Joseon, en 2do milenio CE

Descripción

La danza tradicional coreana originó en antiguo rituales shamanistic millares hace de años. Para el momento en que de los reinos coreanos más últimos, Goryeo y Joseon, en 2do milenio CE, danza tradicional coreana beneficiada de la ayuda regular de la corte real, academias numerosas, e incluso un ministerio oficial del gobierno.

Un número de diversas danzas ganaron alto estado permanente, incluyendo la danza del ermitaño, la danza del fantasma, la danza del Monk, la danza y otras de Oudong (actor), a pesar de que muchas tenían orígenes humildes. Por ejemplo, la danza del ventilador se cree para haber originado con los shamans que realizan rites de la naturaleza con las hojas sino para haberse desarrollado en una de las danzas coreanas lo más altamente posible refinadas.

DANZA: DANZA CHINA. Al igual que muchas disciplinas tradicionales chinas, la danza es atravesada por un profundo entendimiento de la relación entre el hombre y el cosmos, entre mente y espíritu.

El profundo significado de la danza clásica china

Al igual que muchas disciplinas tradicionales chinas, la danza es atravesada por un profundo entendimiento de la relación entre el hombre y el cosmos, entre mente y espíritu


Por Ileana Alescio – La Gran Época
21.05.2007 07:00


Espíritu de la China tradicional: la bailarina principal y coreógrafa Vina Lee interpreta “El Baile de la Flor de Ciruelo”. Floreciendo durante el invierno, los chinos han tomado esta flor como un símbolo de inquebrantable fuerza interior y hermoso espíritu que no se dobla o se marchita ni en las más ásperas de condiciones. (NTDTV)

Las artes dan sentido a la vida de las personas. Tienen un importante rol en el establecimiento de los valores morales de la humanidad y es una de las fuentes que el hombre tiene para encontrar las respuestas a las preguntas fundamentales de su vida. Por eso mismo, las artes influyen en los valores de la gente, y a su vez, los valores de la gente influyen en las artes.

Desde la antigüedad, la música es una de las artes con mayor influencia en la sociedad, quizás debido a su carácter universal que la hace más accesible a todos los estratos sociales y culturas que otros tipos de artes como la pintura y la escultura, generalmente más reservadas a ciertos círculos específicos o élites.

Confucio observó hace 2.500 años que esta forma de arte refleja los valores sociales: “No hay nada más efectivo que la música para mejorar los hábitos y costumbres existentes”, dijo en Yue Ji (Notas sobre la Música). También dijo: “La música es la sublimación de la moralidad”.

Con su cercana conexión a la música, la danza por supuesto también puede afectar el código moral de una persona. “Uno conoce los principios de una persona al verla bailar”, señaló Confucio. A una escala mayor, uno puede conocer los principios de toda una sociedad a través de su danza.

 

La danza tradicional china, la danza de la “Tierra Divina”

 

En la antigüedad, a China se la llamaba la “Tierra Divina”, ya que los 5.000 años de su cultura están atravesados por un profundo entendimiento de la relación del hombre con el cosmos, y la convicción de que el ser humano tiene un origen divino al cual debe regresar. Este carácter es evidente en todos los aspectos de la sociedad antigua china, desde la arquitectura a la agricultura, desde la ciencia a las artes. Y la danza no es una excepción. Para entender mejor la profunda connotación de la danza clásica china, La Gran Época entrevistó a Vina Lee, coreógrafa y bailarina principal de la Compañía de Representación de Artes Divinas, hoy por hoy la única compañía de danza clásica china que rescata los valores tradicionales en sus representaciones. Esta compañía nació en Estados Unidos y está de gira por las principales ciudades del mundo con su Spectacular de Año Nuevo Chino. Vina nos explica:

“La danza china pone énfasis en “los gestos corporales” y las “connotaciones gestuales”, y expresa una característica fundamental de la cultura tradicional china, la cual consiste en unir gesto y espíritu. El espíritu de uno dirige el movimiento, y los movimientos comunican el espíritu. Por supuesto, para poder transmitir el espíritu mediante un movimiento, el bailarín necesita un riguroso entrenamiento, tanto en la parte física como en la espiritual, ya que los movimientos no sólo necesitan ser certeros y precisos, también deben ser sutiles y capaces de comunicar el espíritu. Esto requiere que los bailarines tengan un estado mental adecuado, y también que sean capaces de dejar que el espíritu guíe los movimientos, para controlar con precisión cada parte del cuerpo. Al perfeccionar su cuerpo físico y habilidades, los bailarines también necesitan perfeccionar su carácter moral y fuerza de voluntad”.

 

La técnica

 

Las características de la danza clásica china son la elegancia y la nobleza. Sus movimientos fundamentales enfatizan los brazos, los ojos, el cuerpo, el trabajo con los pies y la coordinación. La coordinación se refiere a coordinar los brazos, los ojos, el cuerpo y los pies. Para realizar una danza china, uno debe ser experto y hábil en todos los puntos mencionados. Los movimientos deben ser fluidos, gráciles y agradables a la vista.

“Una bailarina debe ser como una flor de loto deslizándose en el agua. Debe tener una figura recta y alta, como el tallo de una flor de loto. Sin embargo, los movimientos deben verse naturales y sin esfuerzo. Un bailarín debe caminar con las puntas de sus pies hacia afuera y con sus rodillas ligeramente flexionadas”, explica Vina.

La danza clásica china es diferente del ballet occidental. El ballet enfatiza las líneas mientras que la danza clásica china enfatiza la armonía y el movimiento circular. Por ejemplo, los “dedos de orquídea”, una posición típica de la danza china, requiere que los dedos estén ligeramente arqueados y los hombros ligeramente flexionados. Un bailarín nunca mantendrá sus brazos extendidos a menos que sea un acto en el que condena a alguien.

Al igual que el ballet clásico occidental, la danza china es una disciplina muy exigente que requiere de una gran preparación, aunque la técnica es diferente. “Aunque en la danza china también hay ejercicios como los del ballet, sobre una barra o en el piso, los métodos básicos de expresión difieren: una bailarina de ballet extiende la línea de su cuerpo; la danza china, en cambio, expresa las líneas de diferentes maneras. En las danza clásica china, los bailarines pueden necesitar inclinar sus cuerpos, formar un círculo con sus brazos o flexionar sus piernas para expresar diferentes líneas. Cuando alcancen los requisitos exactos de los movimientos, expresarán la elegancia de la danza china. Debido a la amplitud de los movimientos, la danza china permite retratar una amplia gama de personajes, sentimientos y personalidades”.

Además, hay otras técnicas importantes en la danza china, tales como el círculo, el giro, la inclinación y la flexión. Explicaremos un poco estas técnicas.

La flexión se refiere a que un bailarín debe mantener sus rodillas ligeramente flexionadas, si no, luciría como si sólo estuviera caminando por el escenario y no podría representar ningún personaje. Estos son los detalles que los bailarines chinos deben practicar una y otra vez.

Inclinación significa que una bailarina no debe estar parada en el escenario como si fuera una estaca. Su cuerpo debe moverse como el tallo de un loto balanceándose suavemente con la brisa para presentar la belleza natural del cuerpo humano.

“En la antigua china, cuando una doncella veía a un hombre, se ruborizaba inmediatamente. Entonces, se cubriría el rostro con su manga y bajaría la cabeza. Esa es la elegancia natural de una dama china. Con estos detallados movimientos corporales, la audiencia sabrá qué hay en su mente. Un bailarín debe mostrar valor y heroísmo en sus movimientos y sus ojos también deben mostrar el espíritu necesario. Sólo incorporando espíritu, elegancia, forma y movimiento corporal es que un bailarín será capaz de expresar en su totalidad el estilo y la elegancia únicos de la danza clásica china”, nos cuenta Vina, dejando en claro que para lograr una buena interpretación, un bailarín necesita mucho más que una buena técnica.

Al igual que con otras artes, en China la danza no se transmitió en forma sistemática como en occidente, es decir, no existían academias ni institutos especializados para aprender las técnicas. En los diferentes periodos de la historia china, eran los guerreros quienes realizaban las danzas, sea para el público en general o para el mismo Emperador, y hacían movimientos, giros y ataques con técnicas de artes marciales. No es casual que el ideograma “wu” en la palabra “wu shu” (artes marciales) se pronuncie igual que el ideograma “wu” en la palabra “wu dao” (danza), y no sólo eso: si se utiliza el ideograma “wu” de “wu shu” en un contexto suave, se refiere a la danza, y al mismo tiempo, el ideograma “wu” de “wu dao” en un contexto agresivo se refiere a las artes marciales.

Por esta razón, las técnicas avanzadas de la danza china incluyen derribes, saltos y vueltas que son más difíciles de hacer y requieren una mayor maestría técnica que los del ballet clásico. También, al no haber habido una enseñanza sistemática sino hasta en los últimos tiempos, la danza china tiene muchas más posibilidades de creación que el ballet clásico, ya que cuenta con más movimientos y una historia de 5.000 años de la cual se pueden contar muchas cosas. “Esto la diferencia del ballet, ya que éste cuenta con un número determinado de movimientos, y si uno se sale de éstos, ya no se considera ballet. En cambio, la danza china no pone límites con respecto a los movimientos, en ella lo verdaderamente difícil es lograr el perfeccionamiento de la técnica y el estado mental apropiado para transmitir todo el significado del espíritu con un solo movimiento”, detalla Vina.

 

El componente yun

 

Claro que entre la danza china y el ballet clásico hay todavía otra diferencia que no se trata solamente de las técnicas, sino de algo más profundo, que los chinos llaman “yun”. Este “yun” se trata de una característica cultural innata, y es particular de cada etnia, como si la herencia cultural estuviera impresa en los genes. Esto es otro reflejo del entendimiento chino de que cuerpo y espíritu son lo mismo, ya que este “yun” es el reflejo de la etnia de una persona en sus movimientos y carácter, algo que en occidente se consideran cosas diferentes.

Este “yun” es tan profundo y propio de cada etnia, que aunque un occidental se criara en China y aprendiera la danza desde pequeño, nunca podría representarla igual que un chino, porque este “yun” se manifiesta en cada movimiento, incluso en los más simples como levantar un brazo o una pierna y las expresiones faciales. Esto es porque “yun” no es algo que se pueda aprender, sino que viene heredado por la historia cultural de la propia etnia, como un lazo que une a la gente a través de la historia.

Lamentablemente, estos conceptos esenciales se han perdido hoy en día en China, especialmente después del movimiento comunista de la “Gran Revolución Cultural” en la década de 1960, todos los conceptos culturales tradicionales fueron perseguidos y la gente ya no reconoce estos legados milenarios. Como resultado, la producción artística de los últimos cincuenta años en China perdió su significado original, y refleja al mismo tiempo la gran decadencia moral que ocurre en China desde que el Partido Comunista asumió el poder. Esto, sumado a la gran influencia del arte occidental en China –arte que también sufrió el impacto de la decadencia moral y la desviación de los valores tradicionales– hicieron que la verdadera cultura china quedara enterrada y casi olvidada.

“En la creencia tradicional china, los emperadores que guiaban al país eran colocados en sus posiciones por su sentido de respeto, justicia y responsabilidad, y tenían la aprobación del Cielo. Pero desde que asumió el Partido Comunista en China, la gente fue forzada a olvidar todo eso”, cuenta Vina, explicando también por qué considera que las actuaciones de Artes Interpretativas Divinas son tan importante tanto para que los chinos recuperen su tradición como para que los occidentales descubran esta maravillosa cultura.

“Mediante estas actuaciones buscamos mostrar a la audiencia los valores tradicionales de la cultura china, la nobleza, la rectitud, el decoro. Con esto aspiramos a demostrar que hay una esperanza de recuperar los valores tradicionales y de detener la acelerada decadencia moral mundial. Nosotros creemos que los dioses nos han legado una herencia preciosa, una cultura única que lamentablemente se ha perdido, tanto en Oriente como en Occidente”, comenta.

Reconocer el “yun” que los dioses dejaron en nuestro interior es esencial para que podamos recordar quiénes somos verdaderamente. El arte puede ayudarnos a recordar, y eso es uno de los roles que está jugando estas interpretaciones de danza clásica china.