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FILOSOFÍA9: TEXTOS DE SABIDURÍA: OSHO. LIBRO DE LA SABIDURÍA. En la Sabiduría se destaca el juicio sano basado en conocimiento y entendimiento; la aptitud de valerse del conocimiento con éxito, y el entendimiento para resolver problemas, evitar o impedir peligros, alcanzar ciertas metas, o aconsejar a otros. Es lo opuesto a la tontedad, la estupidez y la locura, y a menudo se contrasta con éstas. Tomás de Aquino define la sabiduría como "el conocimiento cierto de las causas más profundas de todo" (In Metaphysica, I, 2). Por eso, para él, la sabiduría tiene como función propia ordenar y juzgar todos los conocimientos.

Osho: Libro de la Sabiduría

|5. Agosto.05|

flor del loto en la Ciudad Prohibida, China

Uno de los mayores deseos de la humanidad es la libertad. Los seres humanos ansían la libertad. La libertad es el núcleo esencial de la conciencia humana: El amor es su cincunferencia y la libertad es el centro. Cuando ambos estan satisfechos, la vida no tiene de que lamentarse. Y los dos se satisfacen juntos, nunca por separado.

La gente ha intentado satisfacer el amor sin libertad. Entonces el amor trae más y más miseria, más y más esclavitud. Entonces el amor no es lo que se esperaba, se convierte justamenete en lo opuesto. Hace añicos toda esperanza, destruye todas las espectativas y la vida se convierte en un páramo, un andar a tientas en la oscuridad sin encontrar nunca la puerta.

El amor sin libertad tiende naturalmente a ser posesivo. Y en el momento que la posesividad ingresa, uno comienza a crear sumisión para los otros y sumisión también para uno mismo, porque no se puede poseer a alguien sin ser poseído por ese alguien. No puede hacer de una persona un esclavo sin convertirse también en esclavo. Lo que haga a los demás, hará a sí misma.

Este es el principio básico que se debe entender: el amor sin libertad nunca trae realización.

Y también hubo gente que intentó el otro extremo: libertad sin amor. Estos son los monjes, los escapistas, la gente que renunció al mundo. Temerosos del amor, temerosos del amor porque trae sumisión, renunciaron a todas las situaciones en las que el amor podía fluir, crecer, suceder, de ser posible.

Escaparon al aislamiento. El aislamiento nunca se convierte en soledad, permanece aislado. Y el aislamiento es un estado negativo, es absolutamente vacío, es triste.

Uno puede ser un solitario, pero eso no trae soledad.  El solitario experimenta sólo soledad física, la soledad es aislamiento espiritual. Si está solo solo. . . y lo estará si ha renunciado al mundo.  Si ha escapado del mundo por miedo, estará sola/o; el mundo la perseguirá y toda clase de deseos la rodearán. Sufrirá millones de pesadillas, porque sea lo que sea a lo que ha renunciado, no puede ser descartado tan fácilmente.

La renuncia es represión y nada más. Y cuanto más reprima algo, más necesitará reprimirlo. Y cuanto más siga reprimiéndolo, más poderoso se torna.  Irrumpirá en sus sueños, irrumpirá en sus alucinaciones. La gente que vive en monasterios comienza a alucinar, los que van a las cuevas en el Himalaya, tarde o temprano dejan de estar en contacto con la realidad. Comienzan a crear su propia realidad, una realidad privada, una realidad ficticia. . . .

Por otro lado está la persona, la persona mundana que trató de encontrar el amor sin libertad y falló. Su vida no es más que una larga, larga esclavitud de mucha, mucha gente, muchas, muchas cosas. No es libre de hacer el menor movimiento. Este es un fracaso; la mayoría de la humanidad se encuentra atrapada en ese extremo.
 
Unos pocos escapan del mundo: viendo la miseria, comienzan a buscar el otro extremo; libertad, moksha, nirvana.  Pero se vuelven neuroticos, psicóticos, comienzan a vivir en sus propios sueños. La soledad es tanta que deben crear algo para existir.

Ambos esfuerzos extremos han fallado.  Por lo tanto la humanidad se encuentra en una encrucijada: ¿adónde ir? El pasado falló completamente. Todos los esfuerzos realizados en el pasado resultaron erróneos, condujeron a cul-de-sacs, a lugares sin salida.  ¿Dónde ir ahora? ¿Qué hacer?
 
Atisha tiene un mensaje importante para entregarle.  Y ese mensaje es el mensaje de todos los Budas, de toda la gente iluminada del mundo. Y dice: El amor y la libertad no son cosas separadas, no se puede elegir. O tendrá que tener ambos o tendrá que dejar ambos. Pero no puede elegir, no puede tener uno.
 
El amor es el perímetro del círculo, la libertad es el centro.

Uno debe crecer en tal delicado balance donde el amor y la libertad puedan florecer juntos. Y pueden, porque a unos pocos raros individuos les ha ocurrido. Y si le sucedió a un sólo individuo en toda la historia de la humanidad, puede sucederle a cada ser humano. Es su potencial, ¿su derecho de nacimiento?.

 

Obtenido de http://www.mujeresdeempresa.com/arte_cultura/050801-osho-libro-de-la-sabiduria.shtml

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