Blogia
petalofucsia

POLÍTICA7: HETERONOMÍA DE LA VOLUNTAD. La voluntad puede estar determinada por dos principios, puede tener dos fundamentos: la razón o la inclinación. Cuando es la propia razón la que decreta el modo en que debe actuar la voluntad, ésta es autónoma porque se da a sí misma sus propias leyes. Sin embargo, cuando la voluntad está determinada por la inclinación (palabra con la que Kant se refiere al conjunto de apetitos sensibles) la voluntad es heterónoma.

Heteronomía de la voluntad

De Wikipedia, la enciclopedia libre

Heteronomía de la voluntad es un término técnico introducido a la filosofía por Immanuel Kant para hacer referencia a la voluntad que no está determinada por la razón del sujeto, sino por algo ajeno a ella (la voluntad de otras personas, las cosas del mundo, la sensibilidad, la voluntad divina, etc.)

La voluntad puede estar determinada por dos principios, puede tener dos fundamentos: la razón o la inclinación. Cuando es la propia razón la que decreta el modo en que debe actuar la voluntad, ésta es autónoma porque se da a sí misma sus propias leyes. Sin embargo, cuando la voluntad está determinada por la inclinación (palabra con la que Kant se refiere al conjunto de apetitos sensibles) la voluntad es heterónoma.

Esta tesis kantiana puede parecer extraña para la forma actual de entender las cosas, pues ahora es más bien común creer que se es libre si se es capaz de realizar todos y cada uno de los apetitos que se tengan, por lo que se considera a la ley moral como un estorbo para la libertad absoluta, entendida como capacidad para hacer lo que plazca. Sin embargo, Kant pensó que cuando existe el propósito de seguir las reclamaciones de los deseos o apetitos la conducta no es libre, pues su realización sólo es posible plegándose a las exigencias que impone el mundo y, por tanto, a algo exterior a la propia voluntad. Por ejemplo, si alguien considera que el principio que debe regir su conducta es el de obtener reconocimiento social por encima de todo, su conducta no será constante pues tendrá que someterse a las exigencias determinadas por el cambiante orden social: si desea conseguir el aplauso de la mayoría deberá cambiar de partido político, o de amistades, o de ideas cuando las circunstancias lo hagan necesario.

Véase también [editar]

Enlaces externos [editar]

0 comentarios